Miércoles 20 de Marzo de 2013

Aniversario de Villa Real

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El lunes 18 cumplió 104 años el barrio de Villa Real. Es el más chiquito de la ciudad de Buenos Aires.

A principios del siglo XX, el Ferrocarril que viajaba de Buenos Aires al Pacífico atravesaba estas tierras despobladas, surcadas por el arroyo Maldonado. Vestían el paisaje las las quintitas de verduras que perfumaban con hinojos y berros el paso del tren.

En 1909 se construyó la estación de tren en lo que hoy es el cruce de las calles Tinogasta e Irigoyen. La bautizaron así, con este nombre elegante, porque en este bendito paraje los virreyes construían sus quintas para escapar a los sofocos del verano porteño. Poco a poco se fue poblando. Entre las callecitas de tierra iban levantándose las casas. Se escuchaba el trajín de los serruchos, el golpeteo del martillo entreverado con el perfume del cemento recién mojado.

Hombres y mujeres abandonaron los conventillos y compraron sus terrenos para concretar el sueño de la casa propia. Dos palmeras centenarias sombreaban el barrio de Villa Real. Hoy, una sola sigue señalando al cielo en el lugar donde antes estuviera la estación de tren que hoy es una plaza. Villa Real, un barrio de casas bajas, alhajita de la ciudad, cuenta una historia de perfumitos de hinojos y cemento fresco entre manos laboriosas.

¡Felices 104 años a la buena gente del barrio de Villa Real!