Martes 01 de Septiembre de 2015

Año de la Misericordia

Francisco pidió "no excluir a nadie", en la carta que envió a monseñor Rino Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización con motivo del Jubileo extraordinario de la Misericordia.

Compartir en Redes

El obispo de Roma escribe en primer lugar sobre los peregrinos que en cada diócesis o en Roma vivirán esta gracia del Jubileo, y explica que deberán hacer una “breve peregrinación” hacia la Puerta Santa, abierta en cada catedral o en las iglesias establecidas por el obispo diocesano y en las cuatro basílicas papales en Roma como signo del deseo profundo de auténtica conversión.

Francisco recuerda en su misiva que es importante que este momento esté unido al sacramento de la reconciliación y a la celebración de la misa con una reflexión sobre la misericordia.

En su carta a monseñor Fisichella, Francisco nombra a quienes por diversos motivos no pueden llegar a la Puerta Santa, como los enfermos, los ancianos o los fieles que están solos, y asegura que también a través de los diversos medios de comunicación podrán obtener la indulgencia jubilar.

El Papa dedica palabras a los presos y les recuerda que “la misericordia del Padre quiere estar cerca de quien más necesita de su perdón”. En este sentido, sostiene que podrán ganar indulgencias en las capillas de las cárceles.



En la carta también se lee: “Que cada vez que atraviesen la puerta de su celda, dirigiendo su pensamiento y la oración al Padre, sea para ellos el paso de la Puerta Santa, porque la misericordia de Dios, capaz de convertir los corazones, es también capaz de convertir las rejas en experiencia de libertad”.

El Santo Padre explica que la indulgencia también se puede ganar para los difuntos. “A ellos estamos unidos por el testimonio de fe y caridad que nos dejaron”, observó el Pontífice.

Fuente: Aica