En el Día del Riachuelo, y a siete años del fallo Mendoza, la Agencia de Protección Ambiental (APrA) de la Ciudad de Buenos Aires participó del evento para rendir homenaje al trabajo realizado para su saneamiento. Estas acciones se realizan en forma coordinada con la Autoridad de la Cuenca Matanza-Riachuelo (ACUMAR), organismo conformado por la Ciudad y la provincia de Buenos Aires, junto a la Nación.
“Tenemos en la actualidad el 100% de los 3.104 establecimientos dentro de la Ciudad fiscalizados y el 100% de los ductos pluviales de la cuenca dentro de la jurisdicción de la CABA inspeccionados. ¡Unos 210 km de ductos!“, afirmó Juan Carlos Villalonga, presidente de APrA, y agregó: “Incrementamos en un 25% las inspecciones en 2014 respecto de 2013, y este año las aumentaremos un 80% respecto al mismo período”.
Este avance es posible gracias al robot Wall-e. En la Ciudad hay dos redes: la red cloacal y la red pluvial. En la primera se deben volcar los efluentes cloacales e industriales (en este caso debidamente tratados para evitar la contaminación); en la red pluvial sólo debe circular el agua que escurre de la lluvia. El pequeño robot, recorre y filma los conductos con el objetivo de detectar conexiones clandestinas.
Wall-E es el robot encargado de inspeccionar las redes pluviales.
Estuvieron presentes, además, el diputado Sergio Bergman, impulsor de la Ley 4162 que declara el 8 de junio como el “Día de la Acción Ambiental por la Cuenca Matanza Riachuelo”; representantes del Consejo Ejecutivo de ACUMAR; directivos de la Universidad de Flores (UFLO) como gestores del proyecto de fitorremediación; el presidente de la Asoc.Vecinos de la Boca, Alfredo Alberti, el Director Ejecutivo de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), Andrés Nápoli; el Gerente de Planta de la cervecería Quilmes, Juan José Ferrer, quien contó cómo vuelvan responsablemente sus efluentes por medio del programa Producción Más Limpia; y representantes del Juzgado Federal 2 de Morón que son quienes se encargan de dar seguimiento al cumplimiento del saneamiento.
Durante la jornada se reconoció el trabajo diario que realizan los operarios y se destacó también la labor de la Policía Metropolitana, que junto con Prefectura realizan guardias en la zona durante las 24 horas.
La Policía Metropolitana junto a la Prefectura Naval son los encargados de vigilar el borde costero durante las 24 horas.
Limpieza de la cuenca
En el año 2010 comenzó a funcionar por primera vez en la historia de la Ciudad, un servicio de Higiene dedicado a realizar tareas de saneamiento y recolección de residuos en los márgenes del Riachuelo.
El servicio se realiza de lunes a viernes a lo largo de 12 kilómetros de extensión de borde costero, entre Vuelta de Rocha, en el barrio de La Boca, y el icónico Puente de la Noria. Cuenta con personal especializado y con dos embarcaciones y equipamiento de apoyo. Las autoridades afirman que en los últimos cuatro años se recolectaron más de 1.500 toneladas de residuos y que el 93% del Camino de Sirga se encuentra liberado.
Barcos remueven basura y otros contaminantes de la Cuenca.
Proyecto de rehabilitación del borde costero
Como parte de las acciones que la Agencia lleva adelante para sanear el Riachuelo, se está implementando un novedoso proyecto de fitorremediación, desarrollado en conjunto con la Universidad de Flores, que consiste en la confección de “biorrollos”: estructuras cilíndricas de un metro de largo por veinte centímetros de diámetro, armados en telas degradables y rellenos con materiales vegetales de poda. En estos rollos se plantan y alojan las especies seleccionadas que, una vez que enraízan, son fijados en la costa.
Estas plantas tienen la capacidad de almacenar en sus raíces metales pesados, que son los principales contaminantes provenientes de la industria.
También se realizan muestreos de aves, cuyos resultados se utilizan como indicadores de la calidad ambiental de la zona.
“Es necesario que el Riachuelo se convierta una verdadera prioridad ambiental a nivel nacional. La magnitud de la tarea pendiente en la totalidad de la cuenca es muy grande y debe destinarse mucho esfuerzo para revertir una situación de postergación y contaminación histórica”. Concluyó Villalonga.
Los Biorrollos contienen plantas nativas seleccionadas que poseen la capacidad de absorber contaminantes de manera natural.
