Los festejos del Día del Árbol comenzaron ayer jueves, con la plantación de árboles nativos en el jardín de infantes Mitre, que se encuentra dentro del Parque 3 de Febrero. Del encuentro participaron más de 200 niños de entre 3 y 5 años, junto con personal del Parque y la Fundación de la Tierra, en un taller de aprendizaje y concientización sobre cuidado del medio ambiente. Hoy por la mañana, se realizó la misma actividad en otro jardín de infantes, Granaderos de San Martín, que también se encuentra dentro del Parque.
Mañana sábado, a las 15, se realizará una nueva plantación de árboles nativos, abierta a la comunidad, en el Parque Olímpico, ubicado en la intersección de la Av. Dorrego y Av. Figueroa Alcorta.
La Ciudad de Buenos Aires tiene más de 425 mil árboles y el Plan Maestro de Arbolado contempla agregar 70 mil más en los próximos 10 años. Embellecen cada cuadra de la Ciudad, hay cientos de especies, tanto nativas como exóticas, y nos ayudan a limpiar el aire y suelo de Buenos Aires.
Entre los múltiples beneficios que nos brindan, los árboles moderan el clima urbano, reducen los vientos y las tormentas, nos proveen de sombra, y filtran el agua, la luz solar y el ruido que producen las grandes urbes.
Todos los árboles plantados durante los festejos fueron donados por el vivero de la Reserva Ecológica Costanera Sur y el Jardín Botánico Carlos Thays, que se encargan de reproducir estas especies autóctonas. Entre los muchos beneficios que traen este tipo de especies están la capacidad de adaptación al lugar y la forma favorable en que interactúan con el medio y las demás especies, como la flora y la fauna. De esta manera, encontramos plantas que son polinizadas por aves o insectos, otras que se reproducen por el viento o plantas trepadoras que crecen sobre árboles nativos.
El Día del árbol o fiesta del árbol es un evento que se realiza en todo el mundo, en el que se recuerda la importancia de los árboles en el planeta. La fecha varía según el país, ya que se establece en fechas donde los árboles pueden arraigarse, y eso varía según los climas y características de cada lugar.
En la Argentina se celebra el 29 de agosto, cuando está terminando el invierno y comenzando la primavera. La primera vez que se celebró fue en esa fecha en el año 1901, gracias a la iniciativa de Estanislao Zeballos.