Viernes 30 de Octubre de 2015

Calzados de autor en el Distrito de Diseño

Bauths es una empresa de diseño de calzado que participó y ganó en la convocatoria de la décima edición de IncuBA. Desde sus oficinas en el Centro Metropolitano de Diseño, imaginan, desarrollan y venden zapatos de autor. Agostina Nacini, fundadora de Bauths, cuenta sobre el emprendimiento y su experiencia dentro del programa.

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¿De qué se trata el emprendimiento? ¿Cómo surgió la idea?
Bauths parte de la idea de crear calzados de autor generando desarrollo de texturas a través de distintas investigaciones y procesos textiles. Este desarrollo tiene como objetivo principal inferir en los procesos y materiales tradicionales del rubro del calzado, con el fin de lograr experimentaciones y resultados que escapen a los estándares establecidos. Apuntamos a generar calzados adaptables a diferentes situaciones de uso que acompañen a las mujeres que buscan constante diferenciación a través del diseño en sus distintas actividades. Desde Bauths, trabajamos con materiales nobles que hacen a la durabilidad y estética del producto. Proponemos innovación de materialidades por medio de la aplicación de técnicas no convencionales sobre la principal materia prima, el cuero, logrando así construir la personalización de cada producto. Es por esto, que los desarrollos se hacen en ediciones limitadas. Creemos que no solo estamos ofreciendo calzados sino también una experiencia por medio de la materialidad, donde el usuario interactúa con el calzado a través de lo táctil y visual, conformando así nuestra identidad de marca.

¿Cómo influye esta profesión en el desarrollo del proyecto y la incubación?
Soy Diseñadora de Indumentaria, recibida de la Universidad de Buenos Aires, Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo. Realicé distintos cursos sobre calzado, más específicamente en modelaje, aparado y armado, con el fin de formarse en los distintos procesos productivo y artesanales del calzado. Esta experiencia nos permitió repensarlos y buscar maneras alternativas que nutren el diseño de nuestros productos. En forma paralela, comenzamos con las investigaciones textiles sobre el cuero, nuestra principal materia prima con el fin de poder modificar el aspecto tanto visual como táctil y así aportar desde el diseño a cada producto.

Ramiro es Licenciado en Administración de Empresa, recibido en la Universidad Católica Argentina y hoy se encuentra finalizando su Maestría en Finanzas en la Universidad Nacional de Rosario. Es él quien se encarga de toda la parte comercial y administrativa del emprendimiento. En el periodo de Incubación, repensamos y profundizamos mucho más el trabajo de nuestro modelo de negocio. Las distintas actividades que propone el programa IncuBA, ayudan muchas veces a tomarnos el tiempo de reveer las acciones de mediano y largo plazo en lo que se refiere al emprendimiento. Poder diagramar planes de acción que conllevan a mejores resultados.

¿Qué herramientas te da Incuba?
Fueron de gran aporte las distintas capacitaciones que se dan en el CMD durante todo el año, sobre todo las propuestas desde Oficina de Moda, en lo que respecta a nuestro emprendimiento. Como así también las tutorías a cargo de INICIA y los distintos curso que ofrecen, junto con las tutorías personalizadas sobre temas puntuales a resolver.

¿Cómo es tener tu oficina en el CMD y dentro del Distrito de Diseño de la Ciudad?
El espacio físico es fundamental para poder desarrollar el emprendimiento y también hace a la visibilidad del mismo, estando dentro del Distrito de Diseño de la Ciudad. Es una muy buena experiencia antes de empezar a pensar en un espacio propio.

¿Cómo se ven cuando salgan de la incubación?
La idea es poder seguir trabajando en el posicionamiento de la marca y seguir creciendo comercialmente. Continuar generando alianzas estratégicas con distintos diseñadores para realizar trabajos en conjunto. Poder incorporar colaboradores con el fin de acompañar el crecimiento de la marca y lograr tener nuestro punto de venta exclusivo.

Fue esencial contar con la multiplicidad de miradas acerca del proyecto, de gente capacitada en distintas áreas que forman parte del programa y del CMD. Adquirimos muchas herramientas esenciales para poder profesionalizar el proyecto y tomar decisiones, que ayudaron al crecimiento del emprendimiento en base a datos, números, estadísticas, que fuimos pudiendo ordenar en el transcurso del año. La buena convivencia entre los incubados hizo también al aporte de ideas y charlas que nutren al emprendedor como al proyecto. Sin dejar de lado el acompañamiento de todo el equipo de IncuBA, que siempre tuvo sus puertas abiertas para escuchar solicitudes personales como del emprendimiento.

Conocé más en www.bauths.com