El Papa Francisco envió al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, una carta con su Bendición Apostólica para los porteños.
Macri se mostró emocionado y coincidió en la idea de cooperar "todos unidos, en la construcción de una sociedad cada vez más fraterna, en la que nadie se sienta extraño o postergado".
En su mensaje, Francisco pidió al Señor que “ilumine y acompañe con su gracia a todos los porteños, de modo que con el auxilio divino puedan ser cumplidas sus más nobles aspiraciones…”.