Entre las calles Jean Jaures y Tomás de Anchorena
Todo alrededor del Zorzal criollo parece ser mito y leyenda, desde los lugares que frecuentaba hasta el lugar donde nació. Pero si hay algo profundamente mágico que se relacione a él, eso es el Pasaje Carlos Gardel. Es una callecita que queda muy cerca de la Avenida Corrientes.
En la esquina del pasaje y la calle Anchorena se alza el monumento a Carlos Gardel de 2,4m de altura y, un poco más allá, el Restaurant "Esquina Carlos Gardel". Este establecimiento antes se llamaba "Chanta Cuatro" y Gardel lo frecuentaba con sus amigos.
Varios murales hacen referencia al Morocho del Abasto, también hay cartelitos de vecinos que solicitan, entre letras de tango, que se cuide el lugar. Viejos hoteles custodian el espacio.
Es como un patio enorme con macetones sobre los costados de las casas. Un centro de atención psicológica provoca simpatía ¡El Bancadero!
Muy cerca de ahí, por Jean Jaures, se halla el Museo Casa de Carlos Gardel custodiado por la Asociación de Amigos, la misma que custodia el Pasaje.
La estación de subte sobre Corrientes lleva el nombre del morocho, Estación Carlos Gardel. ¿No te dan ganas de darte una vueltita?
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