¿Cómo será Buenos Aires dentro de 50 años? ¿Cuántos metros cuadrados de espacio público tendrá? ¿Cuál será el ingreso mínimo por hogar? ¿Cuántos árboles nuevos crecerán? ¿Habrá más o menos ruido?
Muchas de las respuestas a esta pregunta puede darlas el Modelo Territorial, una herramienta diseñada para planear la forma de Ciudad que se construirá a futuro.
Las ciudades se caracterizan por la complejidad y diversidad de actividades, flujos e ideas que concentran. Estas son las condiciones positivas que, junto con las personas que en ella viven, trabajan, estudian y pasean, representan su principal sustento y permiten que sea sostenible en términos ambientales, sociales y económicos.
Por eso, también se reconoce que gran parte de la política urbana debe surgir de consideraciones éticas sobre la Ciudad, es decir, sobre cuál es el modelo de urbe en el que las personas desean vivir.
Este Modelo espera aportar a un debate urbano que se vaya profundizando y construyendo de manera consensuada. Lejos de las perspectivas que analizan estas nociones en términos de rentabilidad empresaria, se sostiene que en este proceso el rol del Estado es ineludible, porque lo que distingue a una ciudad es la presencia de lo público, ya sea a través de las normas como en la toma de decisiones respecto de lo colectivo.
Ciudad Deseable, objetivo del Modelo
Elaborado en cumplimiento de la Ley 2930/08 del Plan Urbano Ambiental, el Modelo presenta una visión de desarrollo urbano a mediano plazo, a partir de la construcción y aplicación de indicadores y lineamientos definidos científicamente. Estos lineamientos responden a los ejes establecidos por el Plan Urbano Ambiental y organizan las políticas de planeamiento, las obras de infraestructura programadas y la modificación de tendencias necesarias para cumplir los objetivos planteados en la Ley.
El Modelo está construido luego del diagnóstico de aspectos generales como el hábitat y la vivienda, la producción, el empleo y el espacio público de Buenos Aires, entre otros; además analiza tendencias detectadas y plantea mejoras en la calidad de vida de las personas, con el fin de lograr la Ciudad Deseable, objetivo final del Modelo.
La Ciudad Deseable es una visión contemporánea construida teniendo en cuenta criterios aceptados en nuestro país y en otras ciudades globales, que considera su pasado, presente y futuro. De esta manera el Modelo cumple con el Plan Urbano Ambiental al establecer la creación de instrumentos de monitoreo y control diseñados para medir, analizar y planificar sobre aspectos concernientes a la calidad y sustentabilidad de la Ciudad en sus múltiples dimensiones.
¿Por qué un planeamiento de 50 años?
El Modelo Territorial de la Ciudad toma como horizonte el 2060, porque científicamente se considera un periodo de cincuenta años como el mínimo necesario para la maduración de procesos o la modificación de situaciones estructurales.
El soporte científico de este modelo de desarrollo se construye mediante el análisis de más de 80 indicadores urbanos que incluyen relevamientos de usos del suelo y de mercado inmobiliario, la sistematización de estadísticas, la producción de estimaciones econométricas, la actualización y difusión de la información como insumo básico para el planeamiento con sustento científico.
Los indicadores se presentan en el Modelo con sus valores actuales, y muestran cuánto falta mejorar para alcanzar valores aceptables, establecidos a partir de lineamientos normativos como los que figuran en el Plan Urbano Ambiental y de acuerdo con estándares y estudios nacionales e internacionales.
Por ejemplo, uno de los principales objetivos, la equidad social y territorial, es mensurable a través del tiempo a partir de indicadores como la equidad en el valor del suelo, el ingreso familiar, el índice sintético de hábitat e infraestructura y otros que refieren a condiciones favorables a la equidad, como la proximidad a nodos de transporte público, a espacios verdes útiles y la mixtura de usos, entre otros.
Una construcción conceptual y metodológica como esta permite elaborar un instrumento estratégico para guiar las políticas públicas de planeamiento. Instrumento que, además, enmarca el debate sobre la actualidad y el futuro de la Ciudad.
La matriz muestra los indicadores organizados en forma integrada. Su primer elemento es el Índice de Sustentabilidad Urbana, que integra los lineamientos teóricos de la Ciudad Deseada de una manera operativa. Imagen: Planeamiento Urbano/GCBA.
Los cuadros representan los índices de complejidad urbana tras el relevamiento de usos del suelo. Se compara la Ciudad actual con la Sustentable del Modelo. Imagen: Planeamiento Urbano/GCBA.