Para llegar a esta situación se realizó una capacitación a cargo del médico cardiólogo, Mario Fitz Maurice. Diego Santilli, presidente de la Legislatura y Vicejefe de Gobierno, dió comienzo al acto.
“Saber utilizar un desfibrilador o hacer bien las técnicas de RCP pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte. Los ataques al corazón son la principal causa de muerte en el mundo. Por suerte vino bastante gente a capacitarse y a partir de ahora saben cómo actuar en estas situaciones límite”, explicó Santilli.
Diputados y empleados de la Legislatura formaron parte de esta charla práctica, en la que se mezclaron conceptos, se ejecutaron movimientos y se ejemplificaron situaciones con videos didácticos. Fitz Maurice, especialista y docente en lo que a eventos cardiovasculares se refiere, fue el encargado de llevar adelante el curso.
El edificio de la Legislatura y su anexo, cuentan con 10 desfibriladores DEA, que son los más simples para utilizar por cualquier persona. Los mismos están señalizados y ubicados estratégicamente de manera que nadie tarde más de tres minutos en llegar a uno de ellos.
“Mientras más seamos los que sepamos cómo desempeñarnos ante un episodio cardiovascular, más protegidos estaremos. En la Sede del Gobierno Porteño ya lo hicimos y hoy fue el turno de la Legislatura. Seguiremos yendo a otros edificios gubernamentales y capacitando”, concluyó Santilli
