El ejercicio de la lectura a través de las pantallas, en este último tiempo se ha transformado en un nuevo hábito en los diferentes integrantes de las familias.
Según UNICEF, durante la pandemia se observó un incremento del uso de dispositivos por más de 90 minutos al día en un 73% en infancias, contrastado con el 15% previo al aislamiento.

Esta tendencia también afectó a la socialización, tanto a las familias como grupos de amigos: 1 de cada 2 padres o madres piensa que estos dispositivos han contribuido al aislamiento de cada miembro familiar, el 25% cree que las pantallas aumentaron los conflictos intrafamiliares y consideran necesario crear hábitos de desconexión, además madres y padres manifiestan la preocupación por el uso excesivo de la tecnología en relación a la salud ocular y el insomnio de sus hijas e hijos.
Es de amplio conocimiento que el hábito de la lectura favorece y mejora las relaciones interpersonales en cualquier ámbito social pero principalmente en el entorno familiar. La familia ejerce una fuerte influencia en la adquisición de estos hábitos, que impactan de manera positiva sobre el núcleo familiar, mejorando la comunicación y los vínculos; además de fomentar la alfabetización favoreciendo la construcción de la autoestima, el pensamiento y el desarrollo personal.

Por este motivo, la Dirección General de Desarrollo Familiar propone un ciclo de actividades que fomenta el hábito de la lectura teniendo como sujeto clave a las familias de la Ciudad, generando instancias de encuentros para fortalecer en los niños y niñas el acercamiento a la literatura y el desarrollo emocional y cognitivo.
Las familias disfrutan de un espacio para leer y de una lectura guiada de cuentos o fragmentos, luego se trabaja sobre dichos contenidos a través de juegos, charlas, representaciones gráficas. Se propone un esquema diverso de contenidos pensados para niños, niñas y adolescentes de diferentes edades y que puedan ser disfrutados y explorados de forma dinámica.
