El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, afirmó esta noche que la presidenta Cristina Fernández “quiere llevar a la sociedad argentina a un modelo chavista, de pensamiento único” que “busca someter a quienes piensan distinto” y sostuvo que los metrodelegados “son una creación del kirchnerismo”.
Señaló que “lamentablemente a pesar de 48 horas de intenso trabajo a pedido de la jueza (porteña Patricia López Vergara) el paro continúa por decisión de los metrodelegados y a pesar de que hay un convenio firmado entre la empresa Metrovías y la UTA”.
“Me queda claro que es un conflicto ciento por ciento político tiene poco que ver con la realidad del subte”, enfatizó.
Apuntó que “lo que acá está en juego son los valores con que vamos convivir en la sociedad: la libertad, el pluralismo, la capacidad de expresarse libremente en disidencia y las reglas de juego”.
Afirmó que el diferendo en los subtes “no es ya cuestión de traspaso” porque “cuando hay vocación de construir hay traspaso, y en ese caso existe una vocación de someter a los que piensan distinto”.
“Cuando la Presidenta hace unos meses dijo ‘vamos por todo’ hoy me queda claro que ella quiere llevar a la sociedad argentina a un modelo chavista, de pensamiento único y ¡cuidado con los que piensan disentir!”, afirmó en una rueda de prensa realizada en el Palacio Municipal,
Añadió que “los metrodelegados venían decidiendo estas medidas desde hace cinco años. Antes no había paros y esto surgió con al aparición de los metrodelegados que han generado cada vez mayor nivel de conflictividad”, dijo el Jefe de Gobierno.
Sostuvo que el conflicto “no es un problema de recursos porque el sistema lo administra la Nación desde hace décadas”.
“Esta empresa tiene una concesión que viene administrada por la Nación y sigue siendo de la Nación, que no ha tenido vocación de sentarse y discutir esa necesidad de recursos”.
Subrayó que lo que tiene el oficialismo “es vocación de atropellar a la Ciudad con la media sanción del proyecto que le quita al Banco Nación los depósitos judiciales, el retiro de la Policía Federal de lugares públicos y el aumento de la luz”.
Macri afirmó que esa actitud del oficialismo “no es contra los porteños o los cordobeses, es contra cualquiera”.
En ese sentido recordó que cuando un representante del sector inmobiliario manifestó la caída de la actividad del sector por el cepo a la compra de dólares, el Gobierno Nacional “le mandó a la AFIP”.
“Eso marca una línea: Significa que no se puede expresar algo distinto que lo que dice la presidenta”, subrayó.
Del mismo modo dijo que no es neutral cuando desde el Gobierno Nacional se ataca al periodismo: “estoy con cada periodista independiente que sea amedrentado por el Gobierno”.
Agregó que “nosotros fuimos elegidos por los vecinos de la Ciudad, buscando que no haya hegemonía de poder, sino que haya un referente que piense y exprese otras cosas diferentes a la presidenta, sino hubiesen elegido al senador (Daniel) Filmus” en alguna de las dos oportunidades que se presentó para Jefe de Gobierno porteño.
