El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, supervisó la puesta en marcha de la primera etapa de las obras previstas para incrementar el caudal de desagüe del Arroyo Vega.
Macri informó que las obras que se inician hoy se espera que contribuyan a mejorar en más de un 40 por ciento el sistema de desagüe.
Estas tareas comenzarán a dar una solución a los problemas de inundaciones que sufren principalmente los vecinos del barrio de Belgrano cuando la Ciudad sufre precipitaciones intensas en muy poco tiempo.
Los trabajos irán seguidos de otra obra de envergadura similar a la realizada en el arroyo Maldonado, que dará solución definitiva al problema.
Macri sostuvo que “sabemos lo que significa que se inunde nuestra casa y perdamos todo lo acumulado durante años de trabajo, el daño afectivo y real que eso provoca”.
“Por eso- recordó- encaramos desde el primer día la obra hídrica más importante que se ha hecho en los últimos 60 años en la Ciudad, la del arroyo Maldonado, que le ha mejorado la vida a cientos de miles de personas”.
“Y hoy estamos lanzando otro tipo de obra, con otra solución técnica en una primera etapa, con la cual vamos a mejorar en un 40 por ciento lo que hoy tenemos funcionando como sistema aliviador del arroyo Vega”, explicó.
Macri formuló declaraciones al poner en marcha los trabajos junto al ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain, en el obrador instalado en avenida Monroe y la calle Ernesto Bavio, en el barrio de Belgrano.
El jefe de Gobierno apuntó que en forma simultánea la Ciudad lanzará una licitación para encarar la otra obra estructural prevista, que se ejecutará con la misma tecnología utilizada para los aliviadores del Maldonado.
Recordó que para poder avanzar con esta segunda fase del plan el Gobierno de la Ciudad espera acceder a financiamiento externo del Banco Mundial “con la colaboración del Gobierno nacional” que debe firmar su conformidad.
Detalle de las obras
La primera etapa de las obras iniciadas ampliarán la derivación del ramal Monroe de la cuenca hídrica desde su actual conexión con el Vega, ubicada en la intersección de la avenida Monroe y la calle Husares, hasta el ensanche del emisario principal debajo de las vías del FFCC Belgrano, 500 metros en dirección al río.
Así, con una superficie extendida a 110 metros cuadrados, se triplicará el área de descarga de las aguas pluviales y la capacidad de escurrimiento pasará a ser de 72 metros cúbicos por segundo. Actualmente esa capacidad de desagüe del aliviador Monroe es de 52 metros cúbicos por segundo.
La cuenca del arroyo Vega ocupa 1.712 hectáreas de superficie en la zona norte de la Ciudad. Para la segunda etapa de la obra, que comprende la construcción de un segundo emisario, el Gobierno porteño llamará a licitación.
Además del túnel, las ofertas deberán contemplar la realización de obras complementarias, que incluirán cámaras derivadoras, obra de descarga y cámara de bombeo.
Este segundo emisario, que estará dividido en dos tramos, tendrá 8.400 metros de longitud total.
De ellos, 2400 metros se realizarán mediante métodos de excavación en galería y los restantes 6.000 metros con tunelera, siguiendo la metodología de trabajo usada con éxito durante la construcción de los dos túneles aliviadores del arroyo Maldonado que corre bajo la avenida Juan B. Justo.
