“Poné el corazón en la meta porque detrás del obstáculo está aquello que buscamos”, dijo Maickel Melamed en la Casa de la Cultura de Villa 21-24. La charla estuvo dirigida particularmente a los más chicos, pero en las butacas había vecinos de todas las edades.
Él nació tras un duro trabajo de parto porque su cordón umbilical estaba rodeando su cuello asfixiándolo. Fue diagnosticado con “retraso motor” que consiste en un estado de hipotonía general del cuerpo, es decir, sin posibilidad de movimiento.
Sus expectativas de vida eran nulas, pero decidió que vivir valía la pena y con el apoyo de su familia se impregnó de confianza. Hoy tiene 41 años y además de haberse formado en diversas disciplinas, practica deportes extremos y hasta llegó a subir la montaña más alta de su país: Venezuela. Actualmente se dedica a ayudar a otros a ser mejores de lo que creen que puede ser a través de conferencias, talleres, coaching y como facilitador.
En una conferencia inspiracional estimuló al público para que realicen los sueños que tienen e incursionó a cada uno hacia el descubrimiento de su verdadero potencial para que lo pongan en práctica. “No me digas no, dime cómo”, fue la frase que quedó resonando en las cabezas de los oyentes una vez finalizada la charla.
