Miércoles 07 de Septiembre de 2016

Manzana D5: trabajo en equipo

Se renovó este espacio en el corazón del barrio Cildáñez.

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En el corazón de Cildáñez se renovó la manzana D5, el barrio tiene nueva cancha de piqui vóley. La obra fue a través de autogestión donde también se hicieron las conexiones a la red cloacal y pluvial.

A partir de una demanda genuina de los vecinos, la Subsecretaría de Hábitat e Inclusión proveyó caños nuevos, pintura, arena, piedra y cemento para que pudieran mejorar su barrio.

El éxito en este proyecto tuvo que ver con la voluntad de cooperación, donde cada una de las partes aportó desde sus capacidades. De esta manera, los vecinos se unieron como comunidad y lograron transformar un espacio gris en lugar de encuentro para celebran días festivos y practicar deporte. Y también es muy importante en términos simbólicos porque alberga a la Virgen de Caacupé.

“Antes nos inundábamos y se tapaban las cloacas”, comentó Oscar Estigarribia, quien vive hace 24 años y participó activamente en la obra. Agregó que la autogestión fue muy importante porque se dieron cuenta “cuán unidos están entre los vecinos, en las cosas buenas o malas”.

En la inauguración se pusieron fotos tomadas antes, durante y después de la obra para que se vieran los cambios en el espacio. También hubo danzas paraguayas para resaltar la simbología de la Virgen de los Milagros de Caacupé y la cancha se estrenó finalmente con un partido de piqui vóley entre los vecinos.