Junto con la AMIA transformamos la estación Pasteur de la Línea B en un espacio para homenajear a las víctimas del atentado del 18 de julio de 1994. El año pasado te lo adelantamos y ahora que finalizamos la intervención, ya podés ver los cambios.
Historietas, ilustraciones, murales, fotografías y canciones de 25 artistas locales ornamentan la estación Pasteur, símbolo del barrio de Once, que fue testigo de lo sucedido por su cercanía con el lugar de los hechos.
Además, en el vestíbulo de la estación, instalamos un centro de interpretación para que puedas conocer más sobre lo que pasó, las victimas y compartir tu testimonio.
Acompañamos también el pedido de ampliar el nombre de la estación a Pasteur - Amia, que se tratará en audiencia pública el 13 de julio en la Legislatura porteña.
Mirá cómo quedó: