A comienzos del 2021 una amplia plataforma regional de afinidad y comunicación entre profesionales de la mediación, la construcción de paz y la transformación de conflictos nos reunimos para diseñar una hoja de ruta que permitiera impulsar una iniciativa que ayude a visibilizar, poner en valor y conceptualizar herramientas de diálogo y participación. En este primer encuentro contamos con 20 profesionales de diferentes provincias (Entre Ríos, Buenos Aires, Neuquén, Misiones y Salta) y países (Uruguay, Paraguay, Panamá, México, Perú y Colombia) que forman parte de la Red de Facilitadores Públicos y Comunitarios de Latinoamérica, la cual cuenta, además, con representantes de organismos internacionales como la OEA.
Con la iniciativa ya en marcha, en el marco del III Congreso Americano de Mediación, seis profesionales que integran esta plataforma expusieron y debatieron sus experiencias en el panel “Políticas Públicas de Diálogo y Construcción de Consenso: una mirada desde Latinoamérica”.
Luego de diversos encuentros e intercambios, cuatro de los integrantes de esta iniciativa publicaron, con el apoyo del National Democratic Institute, el documento “Gestión pública, conflicto y diálogo”. Este trabajo ejecutivo cuenta experiencias llevadas adelante por la Secretaría de Gestión Social y Diálogo de Perú, el Sistema de Mediación de Montevideo, el Plan de Reconstrucción y Desarrollo Sostenible en Honduras y Dialogando Buenos Aires. Estos casos contemplan al diálogo como elemento estratégico en la transformación de conflictos y la construcción de consensos en el ciclo de las políticas públicas, contribuyendo así al fortalecimiento de la institucionalidad democrática y la participación ciudadana.
La lectura de este trabajo permitirá obtener una visión integral de cada actividad - características, desafíos, perspectivas de consolidación - y del impacto y resultados que las actividades que desarrollan tienen en el ciclo de la política pública, contribuyendo así a robustecer la institucionalidad democrática.
Estamos convencidos que este documento es el inicio de un camino que nos permitirá continuar trabajando en una agenda regional de diálogo, vital en tiempos de un alto nivel de polarización y de demanda de instituciones cada vez más democráticas y transparentes.