La Secretaría de Ambiente, la Agencia de Protección Ambiental (APrA) y el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana (MEPHU), plantaron 200 ejemplares de especies nativas en las orillas del Riachuelo en celebración del Día de la Acción Ambiental por la Cuenca Matanza Riachuelo.
Los árboles fueron cultivados y crecieron en el vivero de flora autóctona de la APrA, ubicado en el Centro de Información y Formación Ambiental, en el barrio de Villa Soldati. Esta actividad es el puntapié inicial de un plan que abarca la producción, el cuidado y futura plantación de 10.000 árboles nativos, con el objetivo de seguir revitalizando la biodiversidad de nuestra Ciudad. A su vez, entra en el marco de un conjunto de acciones que el Gobierno porteño lleva adelante para mejorar la calidad ambiental de la Cuenca Matanza Riachuelo y fortalecer la biodiversidad de la zona.
"Esta actividad es el puntapié inicial de un plan que abarca la producción, el cuidado y futura plantación de 10.000 árboles nativos, con el objetivo de seguir revitalizando la biodiversidad de nuestra Ciudad."
En este evento participaron la secretaria de Ambiente porteña, Inés Gorbea, Ariel Álvarez Palma, subsecretario de Políticas de Infraestructura Verde Urbana y Desarrollo Sostenible, Javier Vazquez, Director de Restauración Ecológica y Recomposición Ambiental; el presidente de APrA, Renzo Morosi, Yamil Minakowsi, Director General de Control Ambiental; Lucrecia Panazoni, Subsecretaria de Mantenimiento de MEPHU, Ramiro Peralta, Director General de Limpieza, y Javier Elorrio, Subgerente de Higiene Urbana. A ellos se sumaron funcionarios y personal de la Secretaría de Ambiente y de MEPHU, y vecinos voluntarios de la zona.
"En total se plantaron 180 ejemplares de salix humboldtiana, mejor conocidos como sauce criollo, en una zona baja anegable. Y en la zona alta del talud, se colocaron 10 ejemplares de higuerón (ficus luschnathiana) y 10 ejemplares de timbó colorado (enterolobium contortisiliquum)."
Esta plantación se suma a las intervenciones que se realizan desde el año 2013, en las cuales se incorpora infraestructura verde autóctona en varios tramos de la cuenca, con la intención de recomponer comunidades arbóreas y arbustivas autóctonas existentes pero escasas. La localización de los lugares a reforestar fue definida a partir de un diseño general de biocorredores, realizados por los técnicos de la APrA, que funcionan bajo la idea de unir espacios verdes y nodos de biodiversidad de la Ciudad, para fomentar el flujo de fauna y flora autóctona.
Las especies fueron seleccionadas por sus distintos beneficios, ya que el sauce criollo, por ejemplo, presenta excelentes condiciones para cubrir grandes extensiones de pie de ribera en zonas inundables, y presenta un desarrollo vegetativo a través de raíces gemíferas, lo cual favorece la expansión en el terreno, permite el flujo de semillas y genera condiciones óptimas que favorecen el reclutamiento de otras especies.