En menos de dos meses 38 adultos mayores de distintos barrios porteños ya han realizado más de 20 visitas a escuelas públicas de la Ciudad para leer cuentos y poemas a los alumnos y alumnas del nivel primario. 

Esta feliz iniciativa es el fruto del esfuerzo mancomunado de los voluntarios del proyecto “De mayor a menor” que impulsan el Ministerio de Educación y el Ministerio de Desarrollo Social del Gobierno de la Ciudad con el apoyo del Plan Lectura del Ministerio de Educación de la Nación. 

Es importante destacar las características distintivas de este proyecto. Su peculiaridad reside en la capacitación permanente que brinda a los adultos mayores, en la invitación a que el trabajo sea siempre grupal, en el esfuerzo de acompañamiento a los grupos en las escuelas, en la supervisión y actualización periódica del acerbo literario de los grupos de mayores, y en el trabajo coordinado de los tres Ministerios tanto en el diseño, como en la implementación y el seguimiento del proyecto. 

Las visitas a las nueve escuelas que participan del proyecto comenzaron el 30 de octubre y se extenderán hasta que finalicen las clases. 

Para eso, los mayores fueron capacitados y se agruparon formando equipos según los barrios en los que residen. Hasta ahora, se organizaron grupos de varones y mujeres en los barrios de Lugano, Versalles, Caballito, San Telmo, Boedo, La Paternal, Chacarita y Palermo. 

Los participantes y su lectura están siendo muy bien recibidas por los chicos y sus maestras. ¡Es que nada se improvisa! Los adultos mayores preparan lo que van a leer con anticipación y teniendo en cuenta las edades de los chicos. Algunos leen cuentos de manera individual y otros se asocian para interpretar las voces de los distintos personajes. 

Dar lugar a la lectura es dar lugar a la creatividad y al pensamiento, a la imaginación y a los afectos, por eso cada vez son más los “leecuentos” que se animan a desplegar técnicas simples para hacer volar la imaginación de los chicos. Cabe recordar que promover el ejercicio de este derecho a la lectura fue el objetivo central que persiguió la Fundación Mempo Giardinelli cuando en 1999 impulsó en el Chaco la primera de estas experiencias sistemáticas que se desarrolló en el país. 

Además de fomentar la lectura entre grandes y chicos, el proyecto tiene otros resultados: “los chicos dan más de lo que reciben. Uno llega creyendo que viene a dar y se va habiendo recibido mucho más de lo que dio”, explican, entusiasmados, algunos de los participantes. 

Para el 2009 el Gobierno de la Ciudad prevé continuar con el proyecto y extender su alcance. Los grupos ya conformados seguirán formándose, y se invitará a más mayores a sumarse a la actividad.
Para mayor información, comunicarse al 4300-9606/9649/9659.