Muchísimos, como yo, han visto por televisión la actuación de un muchacho colombiano.
Cuando apareció, usaba una capa hasta los pies, bailando a un ritmo alegre y contagioso. Nada hacia sospechar lo que iba a seguir.
Llego un momento en el que se sacaba la capa, y con una impecable vestimenta blanca, se pudo ver que del lado izquierdo, una también blanca muleta, hacia de sostén y movimientos, suplantando a la pierna que le faltaba.
Después de una hermosa actuación que hacia olvidar, por momentos, la falta de su miembro inferior, tuvo una breve conversación con el presentador del programa. Contó que había nacido “incompleto”, y, después de luchar consigo mismo, pudo llegar a aceptarse tal y como Dios lo había creado.
Ahora, siendo un joven activo, trabajador y excelente bailarín, puede hablar, y con conocimiento y fundamento, que a veces Dios nos pone a prueba, y fortifica nuestro carácter, que, ante la adversidad, reacciona haciendo frente a todos los problemas; y tratando de borrar lo desagradable, que, seguramente, y no sin amargura y traspiés, se logra finalmente lo deseado.
Realmente, un ejemplo de vida que nos induce a pensar que solo la falta de salud, puede llegar a ser un obstáculo en nuestro camino; y me propuse no volver a tener nunca mas, depresiones ni tristezas por banalidades, que se disuelven de la noche a la mañana.
Y hasta me propuse firmemente ¡Saber usar la computadora! Y por supuesto, terminar la secundaria.
|