Con el apoyo de los capacitadores del programa ZAP, en el que trabajo, diseñé una secuencia didáctica que permitiera a los alumnos más pequeños adquirir más herramientas a la hora de leer y escribir. Según mi idea, había que provocar una «necesidad» de escribir. ¡Qué mejor que una película muda! porque los chicos debían interpretar las acciones que acaecían en la pantalla y debían traducirlas a la hoja.

Luego de pasar distintos cortos de Buster Keaton y de explicarles lo que ocurría en los filmes, les pedí que escribieran los hipotéticos diálogos, que leyeran los escasos carteles que aparecían en las cintas y que escribieran ellos mismos otros para relatar lo que iba pasando. Me llevé dos grandes sorpresas: por un lado, los chicos disfrutaron de la proyección y rieron a carcajadas; y ellos produjeron diálogos e ideas muy imaginativas. Era paradójico ver los dibujos que acompañaban a las palabras, con mucho color, pese a que la película es en blanco y negro: esto me indicaba el modo en que asimilaban las imágenes. Por otro lado, también me sorprendieron las ganas de los alumnos con más dificultades, ya que se esforzaron más que nunca para ponerle palabras a todo lo que habían visto.

Fue muy importante contar con el apoyo tecnológico que hoy en día hay en todas las escuelas –al menos en las que estuve–, ya que pudimos escribir, por ejemplo, en la pizarra interactiva los diálogos con la película pausada.

Creo que este es un tema que da para trabajar más todavía y que ofrece muchas variantes así como también la interacción con otras áreas. Fue importante darles a los chicos el significado del filme, generalmente moralejas simples: la lucha por el ser querido, las peripecias y desventuras para lograr algo, el esfuerzo para la aceptación de familiares, entre otras.

La idea final es filmar un corto con los chicos, quienes deben redactar la historia. Para hacerlo, podemos trabajar en conjunto con los profesores de Tecnología y de Plástica (diseño de fondos escénicos), de Educación Física (práctica de acrobacias), de Música (ejecución del piano), de Computación (redacción de las historias en un procesador de textos) y de Inglés (traducción de títulos y carteles de diálogos de las películas). Les recomiendo hacer esta experiencia, y verán cómo las capacidades de los chicos se manifiestan de formas que los van a sorprender.