El Ministerio de Ambiente y Espacio Público del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires recuerda que hace unas semanas puso en funcionamiento un programa de reducción de energía en los edificios de la Comuna. Los acondicionadores de aire se mantienen a 24 grados y las luces, computadoras y otros artefactos son apagados al fin de cada jornada.

Respecto al reemplazo de lámparas incandescentes de edificios públicos por otras de bajo consumo, el ministerio aclararó que estas últimas, si bien consumen menos energía, contienen una carga de 5 mg de mercurio y también fósforo, y que ambos son agentes de distinto impacto contaminante y con efectos nocivos comprobados para la salud de las personas.

"En países como EEUU, Canadá y Australia ya se trabaja responsablemente sobre estas contingencias caseras y con consecuencias negativas para la salud, hasta el punto de que se han realizado detalladas y efectivas campañas de difusión para que la población sepa que debe abrir inmediatamente las ventanas de la habitación y salir de la misma sin respirar ante la rotura de una lámpara de bajo consumo que libera mercurio", señaló el Ministerio.

Los estudios científicos demuestran que entre los efectos nocivos del mercurio para la salud están los trastornos neurológicos, en el aparato reproductivo, malformaciones varias y mal funcionamiento de los riñones.

En ese sentido, la Agencia Ambiental, dependiente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público, está desarrollando un Plan de tratamiento y disposición final de esas lámparas. En este momento están en conversaciones con las productoras y distribuidoras de lamparitas y, terminadas las reuniones, se pondrá en marcha un plan piloto.

No obstante, ya se determinaron una serie de medidas de ahorro energético “conscientes de la necesidad de hacer un uso racional de la luz y a fin de apoyar el plan de ahorro de energía y reducir la carga de energía del alumbrado de la ciudad”, expresó Juan Pablo Piccardo, Ministro de Ambiente y Espacio Público.

Entre esas medidas complementarias figuran:

- Apagar las luces del obelisco a partir de las 23 hs.

- Apagar las luces de fuentes y monumentos a partir de las 23 hs., siempre y cuando el circuito de iluminación sea independiente al de la plaza en la que se encuentran y no genere problemas de seguridad.