El seminario La inclusión escolar de niños, niñas y adolescentes en situación de discapacidad en la escuela común de la CABA tuvo lugar el 26 de septiembre en el auditorio del Centro de Altos Estudios Universitarios (CAEU) de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) y contó con la participación de expositores de la Subsecretaría de Coordinación Pedagógica y Equidad Educativa y la Unidad de Evaluación Integral de la Calidad y Equidad Educativa (UEICEE) del Ministerio de Educación e Innovación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la Universidad de Buenos Aires (UBA), la Universidad Tres de Febrero (UNTREF) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
En la apertura, la Directora Ejecutiva de la UEICEE, Tamara Vinacur, afirmó que el seminario “es un primer paso en dirección a conocer en profundidad los diferentes aspectos y problemáticas que se le plantean a los involucrados en los procesos de inclusión educativa”, al tiempo que destacó la importancia del trabajo de investigación que se realiza desde la UEICEE, que enfrenta el desafío de “producir a tiempo conocimiento riguroso y relevante para que el diseño de políticas educativas realmente contribuya a la mejora del sistema educativo de la Ciudad”.
La primera exposición estuvo a cargo de Melina Arias y Sofía Torres Zabaleta (Subsecretaría de Coordinación Pedagógica y Equidad Educativa, MEIGCABA), quienes presentaron las líneas de acción que el Ministerio desarrolla actualmente en materia de educación inclusiva. En este sentido, se está trabajando en la readecuación de la normativa y en la sistematización de los aportes de los encuentros Dialogando por una Educación Inclusiva, que incluyen espacios de participación con directivos, docentes y otros actores del sistema.
El primer panel Investigaciones recientes en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires: la inclusión educativa en instituciones de gestión estatal estuvo moderado por el Coordinador General de Investigación Educativa de la UEICEE, Juan Martín Bustos.
En la primera presentación, Cecilia Padín y Verónica Rusler (UNICEF) realizaron un recorrido por su trabajo Experiencias de inclusión educativa desde la perspectiva de aprender juntos. Estudio de casos en regiones de Argentina y remarcaron la importancia del acompañamiento de los estudiantes para la inclusión de niños con discapacidad. “Los mejores integradores son los pares”, afirmaron.
La siguiente expositora fue Vanesa Casal (UBA), quien presentó los resultados de su investigación Políticas públicas y prácticas de inclusión educativa en el nivel primario, quien hizo foco en la importancia del contexto para pensar la inclusión en el campo educativo y la necesidad de “salir de la mirada puesta sobre el sujeto para pensar en la situación”.
Por su parte, Egle Pitton y Silvina Larripa (UEICEE) presentaron resultados de la investigación en curso, La inclusión de niños, niñas y adolescentes en situación de discapacidad en el nivel primario y secundario común en escuelas de gestión estatal de la Ciudad de Buenos Aires, en la que realizaron el seguimiento de dos estudiantes en su paso entre niveles educativos. Las investigadoras mostraron los diferentes efectos que se producen si las intervenciones de los maestros de apoyo a la integración se dirigen directamente a los estudiantes o a generar con los docentes las condiciones pedagógicas que favorezcan los aprendizajes desde las diferencias.
El segundo panel La inclusión educativa como desafío colectivo estuvo moderado por Fabiana Demarco (UEICEE). Allí, Norma Filidoro (UBA) remarcó la importancia del trabajo que los docentes llevan adelante en las aulas para la inclusión de alumnos con discapacidad: “la inclusión es día a día, uno a uno”. Patricia Enright (UBA) acordó con ese punto y destacó la importancia del trabajo grupal porque “es lo que da sentido” al aprendizaje.
En el cierre, Laura Kiel (UNTREF) dijo que las prácticas y políticas de inclusión suelen verse fuera del tiempo pero es necesario ubicarlas en su contexto, señaló la importancia de fomentar la integración de los estudiantes con sus pares y afirmó que hay que “pensar una escuela que no se fije en lo ‘raro’ de cada uno sino que mire lo colectivo”.
