Los «Libros copiadores» son un compendio de las copias de los documentos que producía la escuela. Están compuestos por correspondencias, notas, actas de exámenes, legajos del personal, certificados, memorias, informes, calificaciones y registros contables, entre otros. Su función era registrar el calco de un texto original para guardar testimonio e informar de manera veraz. Estos libros estaban foliados y/ o rubricados.
El equipo directivo realizaba la reproducción que quedaba asentada en el libro a través del siguiente método:
- Se introducía el original dentro del libro copiador detrás de una hoja de papel delgado,
- Encima se colocaba una tela húmeda y luego, se dejaba un par de horas en una prensa.
La tecnología fue avanzando y este sistema se reemplazó por la copia en máquina de escribir con papel carbónico y las fotocopias, hasta la actualidad que contamos con múltiples métodos, entre ellos la digitalización.
Los «Libros copiadores» son una fuente primaria de información, donde la comunidad puede acceder a la bitácora de su escuela. La puesta en valor y la difusión de estos materiales promueve la investigación y la posibilidad de nuevos estudios e interpretaciones acerca de la historia pedagógica de la Ciudad.