A través de ensambles de objetos encontrados, instalaciones y collages digitales, esta joven artista propone una mirada sobre la condición humana que navega entre las problemáticas de la violencia y la clandestinidad, junto a las invisibles sutilezas de la naturaleza.
En resonancias de lo intangible, Daniela Goitía alza una voz en el propio vacío que diferentes problemáticas van surcando. En sus ensambles de objetos, conjuga pequeños esqueletos de cotillón con elementos decorativos, que traen consigo diversas cargas semánticas, para subrayar los testimonios mudos del poder disfrazado y la violencia que la sociedad busca callar. Sosteniendo la mínima escala, la serie Infancias avanza sobre el crecimiento invisibilizado de niños y niñas en talleres de costura donde son sometidos sus padres y madres. Resabios de juguetes alteran su lúdico destino al ser atravesados por agujas que reducen a vestigios los crudos testimonios de la clandestinidad.
Insistiendo en el concepto de lo oculto, la serie Simbiosis explora la lenta pero continua recreación de la naturaleza. Patrones en ilimitada expansión construyen flujos táctiles que pasan del formato bidimensional y monocromático a la tridimensión del papel plegado, manipulado en un ritual despojado de todo ruido. Así, Daniela Goitía despliega metamorfosis silentes que se alimentan de un pensamiento artístico sólido y francamente contemporáneo. (Yamila Valeiras | Curadora MBQM)
La muestra podrá visitarse hasta el 3 de noviembre en las salas del museo. Museo Benito Quinquela Martín. Av. Pedro de Mendoza 1835, La Boca, CABA.