En el acto estuvieron presentes la subsecretaria de Convivencia y Orden Público, Elizabeth Caamaño, el jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia y Seguridad porteño, Enzo Cassia y personal de la División Operaciones Especiales Requeridas por el Ministerio Público y de la comisaría vecinal 12 B de la Policía de la Ciudad.
Las donaciones fueron aprobadas por el Juzgado Federal Criminal y Correccional, a cargo del doctor Julián Ercolini y ante la Secretaría 20, y recibidas por el director médico del hospital, Javier Indart, y la directora General de Administración, Jaquelin Rocovich.
“Esta ropa fue secuestrada en procedimientos que hizo la Policía de la Ciudad y le pedimos a la Justicia que nos permitan traerla al hospital para que niños de la ex Casa Cuna, el Hospital Pedro de Elizalde, para que puedan contar con ella las pacientes y sus familias, que a veces pasan meses, sin venir preparados para quedarse tanto tiempo”, sostuvo Caamaño.
Por su parte, el comisario Aráoz señaló que tras las incautaciones hechas en procedimientos por la comisaría a su cargo, “es muy reconfortante para la actividad policial saber que el trabajo de uno es saludable para la sociedad, ya que esta entrega es para los más necesitados”.
Rocovich resaltó lo valioso de la donación porque “principalmente se la destina a los chicos que tienen larga permanencia en el hospital y es conveniente que tengan un aseo y se sientan cómodos, de allí la importancia en el cambio de ropa”.
De acuerdo a la directora administrativa, “en este momento de las 300 camas, aproximadamente 250 están ocupadas y cualquiera de estos chicos pueden hacer uso de estas donaciones”.
Las prendas fueron secuestradas en dos procedimientos que llevó adelante meses atrás la Policía de la Ciudad por infracción a la Ley de Marcas (22.362).
El primero de ellos ocurrió el 9 de junio, cuando personal de la Comisaría Vecinal 12 B interceptó sobre la avenida General Paz a un hombre de nacionalidad peruana que transportaba en una bolsa varios pares de zapatillas de marcas falsificadas.
El otro procedimiento se dio el 29 de junio, en el cruce de la avenida Coronel Roca con Mariano Acosta. Allí, efectivos de la Comuna 8 pararon a una pareja que circulaba en un vehículo utilitario y que llevaba varios bultos en su interior. Al frenar el rodado, los oficiales verificaron que las bolsas contenían indumentaria deportiva de marcas apócrifas.
