Viernes 04 de Diciembre de 2020

Inauguraron un consultorio médico en la sede central de la Policía de la Ciudad con el nombre de un médico fallecido durante la pandemia

Llevará el nombre "Dr. Juan Lobel", miembro del SAME, quién perdió la vida a causa del COVID-19.

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El secretario de Justicia y Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, y el jefe de la Policía de la Ciudad, Gabriel Berard, inauguraron el nuevo consultorio médico de la sede central de esa fuerza, que lleva el nombre de Juan Lobel un médico del SAME fallecido durante la pandemia de COVID-19.

Del acto participaron, además, el subjefe de la Policía de la Ciudad, Oscar Cejas, el director del SAME, Alberto Crescenti, y la médica Alejandra Bibiana Rubilar, quien estará a cargo del flamante consultorio.

“Contamos con este nuevo consultorio llamado “Dr. Juan Lobel”. Lo llamamos así en honor a uno de los integrantes del SAME que murió durante esta pandemia del COVID-19”, sostuvo D’Alessandro.

Previo al descubrimiento de la placa en homenaje al Dr. Lobel, D’Alessandro enfatizó: “Siempre te vamos a recordar Juan por toda tu entrega y compromiso para cuidar la salud de las personas”.

El funcionario sostuvo que el nuevo consultorio “va a servir para atender a todos los oficiales de la Policía de la Ciudad y cuidar a los que nos cuidan”.

Por su parte, Berard confió que junto a la inauguración del nuevo Consultorio Médico Central “surgió el desafío de engalanarlo con el nombre de un exponente capaz de concentrar en sí las virtudes y convicciones que tan noble quehacer exige”.

Y agregó: “conocimos la historia de Juan, su perseverante lucha en busca del sueño anhelado y de inmediato comprendimos que era el indicado: un ser apasionado de la medicina familiar, esposo y padre, amante del canto y las matemáticas, que abrazó con alma y vida el llamado vocacional de luchar contra la muerte, que paradójicamente lo inmortalizó”.

Lobel, de origen humilde, estudió de grande mientras trabajaba como empleado telefónico, atendió a personas hipoacúsicas y una vez recibido con excelentes notas, pasó a desempeñarse en las ambulancias del SAME, con base en los hospitales Grierson y Piñero.

El “Profesor”, como lo llamaban, vecino de Villa Lugano, murió el 29 de agosto, víctima de la pandemia, “honrando cabalmente el juramento de consagrar su vida a la salud de los enfermos”, destacó Berard.