En los últimos años, el uso de las contraseñas se incrementó por la necesidad de proteger nuestros datos e información que se aloja en Internet para que no se vuelvan de dominio público. Las utilizamos, principalmente, para acceder a nuestro correo electrónico y a nuestras redes sociales, como lo son Facebook y Twitter.
Hay que pensar las contraseñas como un candado. Si queremos guardar algo de importancia, vamos a utilizar un candado fuerte para evitar que otras personas accedan a lo que se encuentra en su interior. Así es como funcionan las contraseñas, por lo que a continuación encontrarás una serie de recomendaciones para resguardar tu información:
Las contraseñas deben ser fáciles de recordar para uno, pero difíciles de adivinar para otros. Nuestra contraseña no debe referir a cumpleaños, números de teléfono o direcciones propias.
De la misma forma, es preferible que no generes contraseñas con secuencias. Ej: 1234, acb123, qwerty.
Es mucho más seguro sumar números, mayúsculas y minúsculas en las contraseñas para reforzar su complejidad y evitar que puedan ser descifradas por otros.
No se recomienda tener una misma contraseña para distintos sitios, por ejemplo para ingresar a Facebook y al correo electrónico. Si tenemos la misma contraseña, corremos el riesgo de que la descifren y puedan ingresar a todas las cuentas en Internet que posean esa misma contraseña. Es recomendable una contraseña distinta para cada sitio importante.
Muchas personas temen olvidar sus contraseñas y como consecuencia no poder ingresar a los sitios web. Sin embargo, para registrarnos se nos solicita que brindemos un correo electrónico o, en algunos casos, un número de celular. Esto se realiza no sólo para verificar que quien está generando una cuenta es una persona, sino que además nos brinda la posibilidad de recuperar la contraseña en caso de que nos la hayamos olvidado.
¿Cómo recuperamos la contraseña?
En caso de que olvides la contraseña, para ingresar al sitio suele decir debajo del casillero a completar para ingresar, ¿Olvidaste tu contraseña? o alguna frase similar. Al hacer clic sobre ella se nos pedirá que ingresemos el correo electrónico o el número de teléfono con el que nos registramos. A continuación, nos llegará a nuestra casilla de correo un enlace para que restablezcamos la contraseña.
