El arbolado urbano en la Ciudad de Buenos Aires desempeña un papel fundamental en el paisaje y aporta múltiples beneficios a los habitantes de la ciudad. Pero además, es un hábitat valioso para la fauna urbana, incluyendo aves y polinizadores.
La plantación de árboles nativos en la Ciudad es algo fundamental para preservar la biodiversidad de la fauna y flora local. Al plantar árboles nativos, se brinda un hábitat adecuado para una variedad de especies animales y vegetales que también son nativas de la zona.
Dentro de las especies que conforman el arbolado de la Ciudad es habitual encontrar con mayor frecuencia el Ceibo, la Tipa y el Jacarandá.