El Secretario General, Marcos Peña, el Subsecretario de Relaciones Internacionales e Institucionales, Fulvio Pompeo, y el Subsecretario de Contenidos, Federico Suárez, asistieron en representación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires al primer consistorio del pontificado del papa Francisco, donde el actual Arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, recibió el anillo y el capelo que lo distinguen como cardenal.
Durante la ceremonia, realizada en El Vaticano, el Papa Francisco nombró a 16 nuevos cardenales y tres cardenales eméritos, pertenecientes a 12 naciones.
De los 16, cuatro corresponden a los jefes de departamento de la Curia vaticana -según lo estipula la tradición-, y 12 son residenciales: nueve de ellos, proceden de Latinoamérica, Asia y África.
Durante los 11 meses de su papado, el Pontífice ha recibido en diversas oportunidades a las autoridades del gobierno porteño. En marzo de 2013, Mauricio Macri participó en la ceremonia de entronización del primer argentino elegido como jefe de la iglesia católica; y en septiembre del año pasado el Jefe de Gobierno fue recibido por Francisco en una audiencia privada. En esa ocasión Macri participó además de la ceremonia ofrecida por el Papa en la Basílica de la Virgen Nuestra Señora de Bonaria.
En noviembre de 2013 la Vicejefa del GCBA María Eugenia Vidal y la Ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, fueron recibidas por el Sumo Pontífice en audiciencia privada.
El domingo, Francisco concelebraró la misa con los nuevos cardenales, quienes a su vez oficiaron una Eucaristía en cada una de sus nuevas iglesias romanas en los días siguientes.
