Con mejores condiciones de higiene y seguridad y un diseño moderno y funcional, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires puso en funcionamiento 24 nuevos carritos en la Costanera Sur. De esta forma, regularizó la ocupación del espacio público y la venta de bebidas y alimentos en la zona, luego de un acuerdo firmado con los permisionarios en octubre de 2012.
Los nuevos carritos funcionan a gas y reemplazan a las parrillas a a base de carbón, lo que los hace menos contaminantes y evita una eventual fuente de incendios en la zona cercana a la Reserva Ecológica. Con el sistema a gas, el manejo también se hace más seguro.
Además, los nuevos puestos tienen servicio de agua potable y conexión eléctrica gracias a una serie de obras del Gobierno de la Ciudad. Antes, la mayoría de los carritos no tenía electricidad y se abastecía con grupos electrógenos, y a falta de heladeras para conservar los alimentos y bebidas se utilizaban bolsas de hielo. Tampoco tenían acceso al agua potable. De esta manera, se mejoraron las condiciones de salubridad.
Ahora el diseño es moderno y homogéneo –los carritos son todos iguales, de color marrón en el exterior y blanco en el interior, con toldos de franjas blancas y amarillas. Los puestos antiguos eran estructuras anticuadas, cuyas medidas, cartelería y marquesinas no se ajustaban a las permitidas por la ley. El diseño de los carritos contempla también el espacio para un freezer y una heladera con exhibidor para bebidas.
Los carritos pertenecen al Gobierno de la Ciudad, que los cede en comodato por cinco años a los permisionarios de los puestos. A cambio de la cesión, los encargados de los puestos tienen que conservar los carros en buen estado, mantener limpio el entorno, tener la libreta sanitaria al día y pagar el canon correspondiente. En caso de incumplimiento de alguno de estos requisitos, se pierde el permiso y el puesto.
Los controles bromatológicos de los nuevos puestos están a cargo de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), a través de su Dirección General de Higiene y Seguridad Alimentaria. Para acceder a los nuevos carritos, todo el personal que trabaja en los puestos realizó un curso de manipulación de alimentos.
La Subsecretaría de Uso del Espacio Público, dependiente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad, es la encargada de otorgar los permisos. Dichos permisos son personales e intransferibles para vender alimentos en la vía pública, así como para colocar mesas y sillas alrededor del puesto. Durante distintos operativos llevados a cabo el mes pasado se levantaron alrededor de cinco puestos que no contaban con la habilitación correspondiente y se removieron 10 puestos o trailers abandonados o en desuso, que ocupaban indebidamente el espacio público.
Los inspectores de la Dirección General de Inspección del Uso del Espacio Público verifican además que el puesto sea atendido exclusivamente por sus permisionarios o ayudantes autorizados, que no se comercialicen bebidas alcohólicas ni otros alimentos que no sean productos de parrilla.
La renovación de esta zona de la Costanera Sur forma parte del Plan de Ordenamiento del Espacio Público en la Ciudad, que incluyó zonas como la calle Florida, Parque Centenario y las estaciones de Constitución y Retiro.
Patricio Di Stefano, subsecretario de Uso del Espacio Público, aseguró: "Este nuevo sistema regularizó todos los carritos de la zona para garantizar un mejor servicio, con todas las normas de higiene. Este recambio se suma a la renovación de los carritos que ya se hizo en la Costanera Norte, que junto con otras obras embellecieron esta zona de paseo para que puedan disfrutarla todos los vecinos".
Fotos: Giovanni Sacchetto / MAyEP