Con el uso de maquinaria pesada para evitar riesgos de derrumbes en estructuras que resultaron dañadas, los equipos de emergencia de la Ciudad seguían trabajando hoy en la remoción de árboles, ramas caídas y cartelería y en el apuntalamiento de techos, balcones y mampostería deteriorada por el fuerte temporal de viento y lluvia que afectó al Área Metropolitana el miércoles pasado.
La tarea también incluyó una intensa labor de asistencia social en barrios humildes con la entrega de insumos básicos a familias cuyas viviendas fueron afectadas por la tormenta.
El ministro de Ambiente y Espacio Pùblico, Diego Santilli, continuó recorriendo los barrios màs golpeados por la adversidad climática, en tanto que la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, hizo lo propio en villas de emergencia supervisando la marcha del operativo de ayuda a las personas damnificadas.
"Estamos movilizando a pleno todos los recursos de emergencia de la Ciudad con el objetivo de minimizar lo más posible las secuelas que ha dejado esta tormenta devastadora", dijo Diego Santilli en declaraciones a la prensa luego de recorrer varias zonas afectadas en el barrio de Mataderos,
El ministro recordó que "desde la misma noche del miércoles hasta hoy hemos estado trabajando sin parar y seguiremos haciéndolo con la misma intensidad en todos los barrios de la Ciudad hasta que los efectos de esta emergencia sean completamente reparados y superados".
Cerca de 200 efectivos de las Direcciones Generales de la Guardia de Auxilio, de Logística y de Defensa Civil continuaban trabajando hoy junto a un millar de operarios del Ministerio de Espacio Público y un centenar de asistentes y trabajadores sociales.
El amplio operativo del Gobierno porteño incluyó el uso de grúas telescópicas de 45 a 70 toneladas para retirar ocho carteles de publicidad de grandes dimensiones que se encontraban ubicados en zonas potencialmente riesgosas para las personas.
Expertos de los organismos de emergencia, además, estaban abocados hoy a evaluar caso por caso la situación de estructuras edilicias en las que existe potencial riesgo de derrumbe o colapso.
En la avenida Eva Perón, en el barrio de Mataderos, las actividades se centraron durante toda la jornada de ayer y la madrugada de hoy en la remoción de una decena de árboles caídos sobre viviendas y se hizo una evaluación técnica de la estructura de algunas casas con daños severos, garantizando su habitabilidad..
En Medina 396 hubo que retirar un árbol que había quedado incrustado prácticamente en su totalidad en el interior de una vivienda habitada. Cortarlo y extraerlo demandó casi doce horas de trabajo.
En la calle Bañado, en el tramo que va del 2200 hasta el 2700, en el barrio de Parque Patricios, se llevó adelante también una intensa tarea, ya que fue necesario remover y retirar 10 árboles que cayeron encima de varias viviendas y otros dos que aplastaron dos vehículos.
En Crisóstomo Álvarez 4415, en Villa Lugano, el temporal provocó la voladura de un techo y se reubicó a los moradores de esa vivienda con intervención del equipo de atención social inmediata Buenos Aires Presente (BAP).
En Constitución se derrumbó sobre el tinglado de una escuela ubicada en el cruce de las calles Solís y Brasil la estructura de un quincho que se encontraba en la terraza de una propiedad vecina.
Allí se procedió a retirar las partes con mayor riesgo de caída, lo que permitirá que la escuela pueda funcionar normalmente mañana sin necesidad de interrumpir las clases.
En tanto, la Dirección General de Uso del Espacio Público realizó en las últimas horas diversas intervenciones para prevenir riesgos en inmuebles, postes de alumbrado público y cartelería de publicidad a lo largo de la avenida Alberdi en el tramo que va del 4900 al 6200.
En esa zona se procedió a retirar y restaurar todo tipo de mobiliario urbano dañado desde la Autopista 25 de Mayo hasta la avenida General Paz incluyendo paradas de colectivos, un kiosko de diarios caído y señalética de la vía pública.
En Pompeya continuaron los trabajos de remoción de arbolado dañado en la calle Rabanal y se dispuso el urgente envío de una grúa a avenida Roca 2756 para retirar un árbol caído sobre una casa.
El operativo de emergencia tuvo además activa participación de las juntas comunales e los barrios más afectados, como la 8 (Soldati, Villa Riachuelo y Lugano) y la 9 (Parque Avellaneda, Liniers y Mataderos), que trabajaron desde el viernes a la mañana con 30 personas, dos hidroelevadores, dos camiones de carga y dos palas mecánicas.
Como parte de la tarea destinada a eliminar riesgos las empresas de alumbrado trabajaron con el objetivo de mitigar y prevenir todo peligro de electrocución debido a cables o columnas con riesgo de caída.
Se reportaron 60 columnas de alumbrado caídas, de las cuales ya fueron retiradas 52, mientras que hay ocho que permanecen atrapadas entre àrboles que fueron partidos de raíz y arrojados al piso por acción del viento, a las que se les quitó el suministro de tensión.
Por otra parte, se retiraron de la vía pública 36 artefactos del sistema de suministro eléctrico que cayeron en calles y veredas y se reportó y se solucionó el corte de 42 lingas.
Como tarea adicional se les pidió a empresas privadas que retiraran o acomodaran 16 columnas de videocables que interferían el tráfico o estaban apoyadas en casas de los vecinos.
La reposición de columnas y artefactos comenzará en el curso de esta semana una vez que estén liberadas las calles donde cayeron postes y arbolado.
Las tareas de asistencia social abarcaron a las Villas 20, 15, 21-24, 8, 6, 26, 1-11-14 y 19 y a los barrios Los Pinos, La Paloma, Piletones y Zabaleta.
También se trabajó en los complejos habitacionales Rivadavia 1 y 2, Los Perales, Carrillo 1 y 2, Lacarra y Cruz, Castañares y Portela, Cildáñez, Magaldi, Copello, Nágera y Colonia Sola.
De inmediato se desarrolló un trabajo en red con los referentes barriales para poder realizar aquellos trabajos que fueran más urgentes
Las acciones se desarrollaron a partir de los distintos tipos de emergencia y en aquellos lugares donde se generaron situaciones de riesgo de vida por electrificación y nodos centrales que interrumpieron la provisión de fluido eléctrico, se destinaron recursos provenientes de 13 cooperativas eléctricas y 78 operarios.
Esa tarea permitió reponer con celeridad 77 postes eléctricos, cables concéntricos para bajada a viviendas de 1.580 metros, cables de pre-ensamblado de 843 metros y accesorios para el tendido de morcetos y fusibles.
A su vez, para dar cuenta del servicio necesario para hacer frente a las emergencias sanitarias, se contrataron camiones para transporte y distribución de agua potable, atmosféricos y desobstructores para limpieza de los efluentes cloacales y su desagote y se procedió a la limpieza de los pluviales tapados.
La entrega de materiales para obras de resguardo incluyó 3.033 chapas, 312 tirantes, alfajías, membranas, bolsas de cemento y arena.
Cada cesión de materiales se realizó en coordinación con la comunidad de cada barrio, registrando la entrega para mantener una estadística actualizada de las personas damnificadas.
En el marco de esta tarea tendiente a asegurar contención a los damnificados se coordinó el trabajo de campo para relevar las necesidades y dar apoyo a aquellas zonas más afectadas y se puso en marcha un operativo para llevar insumos de primera urgencia, como colchones, frazadas, alimentos, leche, pañales, ropa para adultos, ropa de niños y zapatillas.
Además, se duplicaron las raciones en los comedores de las zonas más afectadas manteniendo permanente contacto con la comunidad y poniendo a disposición todos los paradores del Gobierno de la Ciudad.
