Su historial, también sus números, que no dejan de sorprender, a esta altura pasan a un segundo plano. ¿Que ganó 231 torneos de golf, entre ellos el Abierto Británico de 1967? No se discute. ¿Que fue una leyenda de este juego y una de los máximos ídolos del deporte argentino? Verdad absoluta. ¿Que fue ejemplo, adentro y afuera de la cancha? Ni hablar. Pero Don Roberto De Vicenzo, quien murió este jueves 1° de junio a los 94 años, dejó un legado mucho más importantes que sus hazañas con el palo y la pelota. Era buena gente, por sobre todo. Campechano y simpático, siempre estaba bien dispuesto a darle una mano a quien tenía enfrente. Un tipo muy querible por todos, en definitiva.
Por eso la Ciudad de Buenos Aires, en marzo de 2015, le hizo un merecido homenaje en la Costanera Sur (sobre Tristán Rodríguez Achával a 200 metros de la entrada a la Reserva Ecológica), donde se levantó la estatua de Roberto De Vicenzo, quien luce su estampa en el Paseo de la Gloria, junto a otros próceres del deporte argentino.
El Paseo de la Gloria es una iniciativa que fue creada con el objetivo de generar políticas públicas que promuevan la participación ciudadana y fomenten la identidad y el sentido de pertenencia, a partir del fortalecimiento de valores comunes y del involucramiento responsable y solidario de la gente. Y cuando hubo que elegir entre los grandes deportistas argentinos de todos los tiempos, cómo iba a faltar el maestro.
Roberto De Vicenzo: el gran maestro
Nació el 14 de Abril de 1923 en Estación Chilavert de Villa Ballester (Buenos Aires), a unos cien metros del club Deportivo Mitre. En septiembre del año 1942 ganó su primer torneo el abierto del litoral con 277 golpes un récord que tuvo 49 años de vigencia. Como anécdota de ese torneo, Roberto llevaba muchos golpes de ventaja, y en el último hoyo la tiró a la cañada que cruzaba enfrente del green del hoyo 18. El no la quería jugar de ahí, pero ante la insistencia del público decidió no defraudarlos y juega la pelota desde el arroyo. Roberto recibió así su primer trofeo, sucio de pies a cabeza. Pero feliz y sabiendo que empezaba ahí una carrera impresionante.
Durante 35 años se mantuvo entre los diez mejores del mundo. Sus números son increíbles: 16 Campeonatos de Profesionales, 9 Abiertos de la República y es ganador del Abierto en 17 países.
Una verdadera leyenda del deporte. Como homenaje a quien llevó el golf del continente a lo más alto del mundo, el PGA TOUR Latinoamérica decidió implementar el “Premio Roberto De Vicenzo”, para aquel jugador que gane la Orden de Mérito cada temporada. Fue incorporado al Salón de la Fama del Golf en el año 1989.
La Ciudad y un merecido homenaje en el Paseo de la Gloria
En marzo de 2015 se inauguró la estatua de Roberto De Vicenzo en el Paseo de la Gloria, un recorrido de esculturas creado para rendir homenaje a los personajes más destacados del deporte en nuestro país.
