En este sentido, estos instrumentos buscan acompañar la implementación del nuevo diseño curricular para el Nivel Primario que se aprobó en 2024 y comienza a implementarse en todas las escuelas de la Ciudad en 2025.
¿Qué se evaluará en 2025?
- 1er grado: Lengua (censal)
- 2do grado: Lengua y Matemática (censal)
- 3er grado: Fluidez y Comprensión Lectora (evaluación censal en ambos sectores)
- 6to grado: Fluidez y Comprensión Lectora (muestral en estatal y privada)
Su objetivo es recolectar información sobre la marcha de los procesos de aprendizaje y ofrecer información para que los/as docentes puedan, a partir del análisis de sus resultados, hacer un seguimiento de las trayectorias educativas y planificar intervenciones que contribuyan al fortalecimiento de los aprendizajes de cada estudiante.
Estas evaluaciones, que serán 100% nominales en ambos sectores y tienen un propósito formativo, se implementarán en dos momentos del año: cerca del inicio, abril/mayo (toma inicial), y cerca del cierre, en el mes de noviembre (toma final). La primera toma de evaluaciones censales se implementará a fines de abril y principios de mayo, en más de 800 escuelas y alcanzará a alrededor de 90 mil estudiantes de la Ciudad de Buenos Aires.
¿Por qué se realizará en dos tomas?
- La primera toma tendrá como eje conocer la situación de los aprendizajes esperados para el año/grado inmediatamente anterior y brindará información sobre los puntos de partida, con el objetivo de contribuir al diagnóstico para el diseño de intervenciones ajustadas a las necesidades de aprendizaje particulares de cada niño/a.
- La toma final podrá brindar algunas evidencias de los avances de los/as niños/as en sus procesos de aprendizaje a partir de dichas intervenciones; a su vez, puede orientar la planificación de las acciones para recibir a esos/as mismos/as niños/as el año siguiente.
Es importante destacar que estas evaluaciones son distintas a las pruebas estandarizadas que se llevan adelante en la Ciudad de Buenos Aires. A diferencia de FEPBA, las evaluaciones formativas que aquí se presentan tienen características similares a una evaluación de aula, lo cual hace que puedan resultar más familiares para niños/as y docentes:
- Son implementadas por el/la docente de cada grado.
- Dentro de un período previsto de manera anticipada en la agenda educativa, cada maestro/a define cuál es el momento más oportuno para que sus estudiantes resuelvan las actividades.
- Son pruebas cortas, dado que ponen el foco en aspectos particulares del aprendizaje.
- Son corregidas por cada docente a partir de claves de corrección comunes.
A su vez, pueden ofrecer una retroalimentación inmediata para el/la docente y, en la medida en que se implementan en todas las escuelas, permiten también construir información a nivel del sistema. Sin embargo, las diferencias enunciadas entre las evaluaciones formativas y las pruebas estandarizadas en las condiciones de construcción de los instrumentos, aplicación y corrección deben ser tenidas en cuenta a la hora de analizar la información que brindan.
Porque lo que no se mide, no se mejora. Los datos contribuyen a mejorar la educación en nuestra ciudad.
