La Ciudad de Buenos Aires ya tiene contenedores de última generación con un innovador sistema de recolección: son de carga bilateral, lo que permite vaciar los contenedores de ambas manos de la calle. Los primeros ya comenzaron a colocarse en el área comprendida por las calles Junín, Vicente López, Montevideo y la avenida del Libertador en Recoleta y se espera que para julio hayan instalados un total de 2600 en las diferentes cuadras de Recoleta, Palermo y Belgrano.
“El contenedor de basura se incorporó definitivamente al mobiliario urbano de la Ciudad de Buenos Aires, lo que nos obliga a revisar constantemente su funcionamiento. Por eso, siempre estamos probando nuevas tecnologías que optimicen el sistema logístico de higiene urbana”, dijo el ministro de Ambiente y Espacio Público, Edgardo Cenzon.
Para vaciar estos nuevos contenedores, instalados por la empresa Cliba, se incorporarán 30 camiones de carga bilateral, capaces de operar tanto del margen derecho como del izquierdo por medio de una grúa y pluma robótica que se extiende hasta el recipiente en forma automática y lo levanta para que las bolsas caigan en la tolva del camión.
Los contenedores de carga lateral que se están instalando en el resto de la ciudad, son operados por camiones que funcionan para vaciarlos de un solo lado (del lado derecho o del lado izquierdo).
La tecnología del sistema bilateral resulta más eficiente porque permite que se puedan levantar los contenedores aún si no están alineados a la altura del camión o si hubiera autos estacionados u otros obstáculos muy cerca de los recipientes. Además, tiene incorporado un sistema lavador que permite limpiar los contenedores por dentro (a presión) y por fuera (con cepillos).
A su vez, los nuevos contenedores tienen una estructura antivandálica de acero galvanizado y no poseen ruedas: se apoyan directamente sobre el piso y es difícil moverlos. Tampoco tienen tapa ni pedal, sino una gran boca de ingreso orientada hacia la vereda.
El sistema de recolección bilateral, de origen europeo, es utilizado en ciudades de Italia, Francia y España y hoy forma parte del plan de contenerización de la Ciudad de Buenos Aires, lo que la convierte en una de las ciudades que utilizan sistemas de recolección de última generación en el mundo.