Antes de extraer:
- Lavarse bien las manos con agua y jabón.
Almacenamiento:
- Recipientes de vidrio o plástico duro con tapa hermética.
- Los recipientes deben lavarse con agua caliente, jabón y secarse al aire libre.
- No llenar hasta arriba (dejar 2,5 cm libres) para permitir que la leche se expanda mientras se congela.
- En el caso de las bolsas de almacenamiento seleccionar las gruesas que están diseñadas específicamente para almacenar leche materna.
- Colocá 40-50 ml de leche en los recipientes para evitar desperdicio.
- Etiquetar con fecha (y nombre del bebé si va a guardería).

Duración:
- No volver a congelar leche ya descongelada.
- Si no se usa en el día, desechar.
Uso:
- Agitar antes de usar (se separa naturalmente en capas).
- Descongelar y calentar gradualmente (las altas temperaturas pueden afectar las propiedades beneficiosas de la leche).
- Descongelar en heladera y al momento de utilizarla calentar en un recipiente con agua caliente o bajo el agua de la canilla por unos minutos (no fuego ni microondas).
Transporte:
- Usar bolso térmico con gel refrigerante o hielo.