Editorial de la revista
Septiembre de 2013. Por Miguel Velardez
El proceso de publicación comienza cuando un investigador o un grupo de investigadores arriba a resultados novedosos para ser contados a todo aquel que los quiera analizar y eventualmente repetir o mejorar. Es a través de las publicaciones que el conocimiento científico se universaliza y, en principio, cualquier persona podría valerse de la información de cualquier publicación (que deberíamos considerar patrimonio de la humanidad) para llevar a cabo nuevos experimentos y seguir avanzando en la generación de nuevos conocimientos. Si este proceso funciona, la ciencia avanza con el aporte y el esfuerzo de todos.
El primer paso para publicar es escribir un documento en el que se cuenta cada paso de los experimentos realizados: qué, cómo y cuándo se hizo; qué materiales y equipamiento se usaron y dónde se consiguieron; quién hizo cada parte de cada experimento; cómo se recopiló la información; cómo se leyeron los datos y qué transformaciones se le hicieron para ser interpretados. La idea central de una publicación es que cualquier investigador de cualquier parte del mundo con sólo leer el documento pueda repetir los experimentos y, en principio, llegar a los mismos resultados que los autores de la publicación. La publicación científica contiene el texto que explica los experimentos y un número variable de fotos, gráficos, videos, registros sonoros, ecuaciones, coordenadas, secuencias de ADN, ARN o proteínas, para mencionar algunos ejemplos.
Una vez que los investigadores (autores) consideran que el documento está listo para ser publicado deciden a qué revista científica lo quieren enviar. Existen cientos de revistas científicas; algunas publican papers de cualquier área del conocimiento (Science, Nature) y otras son revistas especializadas en determinados temas (Journal of Immunology, Applied Physics, Journal of Plant Physiology). Cada revista tiene características propias: formato, frecuencia, precio a pagar por trabajo enviado, etc. Sin embargo, hay algo que es condición necesaria para que cumpla su papel y es que los documentos enviados para publicación sean revisados y evaluados por pares expertos en el tema; es decir, son los revisores quienes deciden si los experimentos descriptos en el documento se pueden considerar un aporte original y significativo para la producción del conocimiento. Es aquí donde radica uno de los puntos más importantes del avance del conocimiento científico. El trabajo del revisor/evaluador consiste en opinar sobre los resultados y, en caso en que los resultados no estén lo suficientemente trabajados, devolver el documento a sus autores con una serie de comentarios que apunten a mejorarlo para luego convertirse en publicación. Una vez que los autores completaron el trabajo siguiendo las indicaciones del evaluador, éstos recomiendan el trabajo al editor de la revista quien se pone en contacto con el autor/autores para informarles que el trabajo fue aceptado para su publicación. Muy probablemente ese día todo el grupo de investigación festeje en el laboratorio. Este trabajo colectivo de crítica y propuestas es, a mi criterio, uno de los pilares del desarrollo científico mundial.
Revista XQ permite que los estudiantes de las escuelas secundarias y los adolescentes, en general, no tengan que esperar a ir a la universidad para adquirir las habilidades necesarias para comunicar un trabajo de investigación de la manera en la que lo hacen los científicos en su práctica profesional.
Revista XQ navegará entre dos aguas que, en principio, parecen no tocarse: la comunicación en un lenguaje ameno y joven y las pautas establecidas y estandarizadas propias de las publicaciones científicas. Este desafío lo abordamos tanto desde la estética como desde el nombre mismo de la revista: XQ, dos letras que denotan una de las preguntas esenciales para el avance del conocimiento “¿Por qué?”; XQ, dos letras que sintetizan el idioma de los jóvenes en su ambiente natural de comunicación, online, electrónico, universal, sintético y efectivo, todas características que la comunicación de los jóvenes comparte con el idioma de las publicaciones científicas del siglo 21.
Revista XQ se presenta como una publicación electrónica de actualización continua y acceso abierto que utiliza la dinámica de redes, crea una comunidad de adolescentes a los cuales los une la pasión por explorar que, al fin y al cabo, es la pasión de todos.