¿QUE ES EL DIM?

Desde que existe la música, el hombre ha reflexionado sobre ella. Es evidente que no ha sido suficiente con crearla, interpretarla, vivirla, disfrutarla. Además, ha sido necesario acumularla -primero en partituras, más adelante en distintos registros fonográficos-, comprenderla, explicarla, analizarla, entender su dinámica, dilucidar sus formas, organizarla por estilos y escuelas, marcar corrientes.

Nadie puede dudar de la significación de Buenos Aires como ciudad creadora y propaladora de hechos musicales. Obviamente, es el principal centro cultural del país. En Buenos Aires se concentra prácticamente toda la industria de espectáculos y discográfica, viven buena parte de los artistas -por haber nacido en ella o por inmigración-, están los principales teatros y estadios y el mayor número de bares, pubs y pequeñas salas donde puede escucharse música en vivo. Esa significación se ha extendido también a la región; y la capital argentina es reconocida como una de las urbes latinoamericanas más atractivas en ese terreno. En Buenos Aires y sus alrededores nació uno de los géneros musicales ahora más importantes del mundo, el tango -con sus parientes cercanos, el vals criollo y la milonga urbana-. Pero a la vez, aquí se han desarrollado y popularizado otros como el rock latino, el pop, el folklore, la bailanta, el jazz y las distintas formas de la música académica; y, más recientemente, las versiones locales de los "crossovers" y de la "world music".

Aún en los duros tiempos de crisis en que vivimos, la ciudad conserva buena parte de su actividad creativa y económica alrededor de la música. Y aunque ya no es posible encontrarse con la misma cantidad de artistas extranjeros que en épocas pasadas, su cartelera musical permanece nutrida y sigue siendo muy grande la agenda de conciertos, recitales, shows y lanzamiento de discos.

Por otra parte, es verdad de Perogrullo que la música es una actividad colectiva. Cuanto menos, se necesitan un compositor, un intérprete y un oyente. Y es obvio además, que la música no puede suceder sin la existencia de salas donde ser ejecutada, partituras a partir de las cuales reproducirse, ediciones fonográficas que permitan su difusión. Pero el proceso es aún más complejo, puesto que, si se pretende que una obra o cuerpo de obras perduren en el tiempo, es imprescindible su conservación, su clasificación, su archivo, su estudio y, naturalmente, su acceso a nuevos intérpretes, arregladores, investigadores, periodistas, programadores radiales y televisivos, compositores, productores, y público.

En las últimas décadas, el estado -a través de sus distintos organismos de cultura- ha dado un fuerte espaldarazo a toda esta actividad; sobre todo a lo concerniente a la programación de recitales y conciertos en vivo y a la publicación de discos. El propio estado porteño ha comprendido todo esto y está apoyando firmemente toda la actividad musical. Al mismo tiempo, se viene observando -también en los últimos tiempos- un mejoramiento en la formación musical de los artistas creadores, una mayor preocupación por salir de un cierto "amateurismo" que predominó, sobre todo, en la primera mitad del siglo pasado -especialmente en el área de la música popular urbana-. El "tocar de oído" o el expresarse "sólo con el corazón" ya no son virtudes que puedan exponerse como tales.

Se hace necesario entonces, si de la música en Buenos Aires se trata, ocuparse, sistemáticamente y de manera orgánica, de recopilar y cuidar los materiales, de ponerlos a la consideración pública, de su análisis sistemático, de poner el ojo científico sobre ellos, de comprender y explicar la música en su complejidad étnica, literaria, semiótica, social, psicológica, histórica y, por supuesto, en sus aspectos estrictamente técnicos. Con ese objetivo, la Secretaría de Cultura del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, a través de su Dirección General de Música, acaba de dar nacimiento al Centro de Documentación e Investigación Musical de Buenos Aires (D.I.M.), que ya cuenta con una pequeña infraestructura edilicia, que espera estar abierto al público para abril próximo y ya está materializando algunos proyectos de investigación y difusión.

En esta primera etapa fundacional, el DIM está poniendo su mayor esfuerzo en armar un cuerpo de archivo, tanto bibliográfico y hemerotecológico -libros, documentos, partituras, revistas- como sonoro -discos en todas sus formas, casettes, cintas abiertas o cualquier otro soporte-, visual -VHS's, DVD's, etc- y documental -programas de conciertos, información variada-. La idea es reunir todo el material posible producido en el país, con especial atención a aquel que tiene su epicentro en la ciudad de Buenos Aires.

El DIM ya cuenta con un importante patrimonio en cuanto a partituras de música popular argentina -recibidas por una donación de la desaparecida Editorial Lagos- y de casettes y CD's; y cuenta además con buena parte del material -manuscrito y original- del compositor Waldo de los Ríos. Y esperamos que ese patrimonio pueda incrementarse sensiblemente en poco tiempo con el aporte de donaciones privadas y con la compra de libros y otras publicaciones. En este momento, los responsables del área biblioteca del Centro se encuentran avocados a organizar y clasificar todo el material existente siguiendo normas de catalogación internacional que nos permitan, en un futuro cercano, establecer contactos con centros de documentación internacionales. Eso permitirá, al mismo tiempo, ofrecerlo a la consulta y/o audición de investigadores, periodistas, difusores y público en general, de manera personal o a través de nuestra página Web. Al mismo tiempo, en el área de investigación y difusión, están en marcha la convocatoria abierta y pública para la presentación de proyectos que se realizarán a lo largo del año 2003, y de artículos y ponencias para los simposios que tendrán a lugar también a lo largo de todo el año. A la vez que se ha programado un ciclo de charlas sobre libros, discos y otras publicaciones a cargo de sus propios autores.

Arriba

EL DIM EN LA PRENSA
Estas son algunos artículos aprecido en medios de prensa sobre la actividad del DIM:

Liut, Martín. "Ganadores del Primer Concurso de Investigación sobre Música: Buenos Aires, en el centro de la escena",
La Nación, Sección Espectáculos (Buenos Aires, lunes 5 de mayo, 2003), p.2

"Bemoles: Población de sonidos",
Clarín, Sección Espectáculos (Buenos Aires, domingo 23 de marzo 2003), p.14

Liut, Martín y Gabriel Plaza. "Preservar la memoria",
La Nación, Sección Espectáculos (Buenos Aires, jueves 27 de febrero, 2003), pp.1-2

Hecker, Pablo. "Crean una novedosa "biblioteca musical"." Ambito Financiero, Sección Arte - Ocio - Espectáculos (Buenos Aires, lunes 24 de febrero, 2003), p.2

Fischerman, Diego. "Los sonidos de Buenos Aires",
Página 12, Sección Música (Buenos Aires, viernes 14 de febrero, 2003), p.25

También se han hecho entrevistas para los programas radiales:
- "Jaque Mate" (Del Plata) conducido por Román Lejtman, marzo2003.
- "Los Pasos Perdidos" (Nacional FM96.7) conducido por Pablo Kohan, abril 2003.

y el programa televisivo:
- "Agenda de Cultura" (Canal Plus Satelital), conducido por Julio Sapolnik, marzo 2003.

Arriba