Desde la Ciudad de Buenos Aires lanzamos la primera Guía metodológica para la planificación y diseño del sistema de movilidad y transporte realizada por una ciudad de Argentina y Latinoamérica, en conjunto con Colectivo Punto 6, una reconocida cooperativa de arquitectas, sociólogas y urbanistas, y contó con el apoyo de la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina). Este trabajo se enmarca dentro del Plan de Género y Movilidad que se presentó a fines de 2019.
Del lanzamiento participaron Juanjo Mendez, secretario de Transporte y Obras Públicas y Lucila Capelli, subsecretaria de Planificación de la Movilidad de la Ciudad de Buenos Aires, Adriana Ciocoletto y Sara Ortiz Escalante por parte del Colectivo Punto 6 y Angie Palacios en representación de la CAF.
Descripción de la Guía
Esta nueva guía metodológica cuenta con herramientas para aplicar, evaluar y hacer seguimiento a la implementación de la perspectiva de género en los sistemas de movilidad y transporte.Tomamos al centro de Trasbordo Federico Lacroze de Buenos Aires (Chacarita) como caso de estudio.
En el trabajo se proponen 28 acciones concretas para mejorar la movilidad con perspectiva de género, como por ejemplo: mejorar la iluminación, incorporar sistemas de arribo predictivo para disminuir las permanencias prolongadas en entornos hostiles y señalizar las cámaras de seguridad de la zona, entre otras.
¿Por qué trabajamos con perspectiva de género?
Las mujeres hacen un uso diferenciado de la Ciudad y de los diversos medios de transporte y por ello tienen necesidades particulares. Por ello es necesario realizar una caracterización sobre las principales dificultades que experimentan las mujeres en relación con su movilidad cotidiana, contemplar los avances normativos que promueven la igualdad de género y observar las acciones que ya están siendo implementadas a nivel local y en distintas ciudades del mundo.
Esta Guía, puntualmente, nos enseña a analizar cómo los roles de género influyen en el uso y disfrute de nuestras ciudades, y cómo el género y su intersección con otras características —como la edad, el origen, el nivel de ingresos, las capacidades, el tipo de unidad de convivencia, barrio o población donde se vive— condiciona y determina las opciones de movilidad de las personas.
Aquí plasmamos el trabajo de muchos años, es un proceso continuo de aprendizaje y lejos está de ser un punto de partida. En este documento, consolidamos estos aprendizajes y experiencias para poder compartirlo, debatirlo y seguir construyendo. El aporte de la CAF y del Colectivo Punto 6 fue invaluable en este proceso.