Introducción

El objetivo central de nuestro proyecto fue desarrollar un trabajo semejante a la actividad científica, es decir, formular y construir modelos de lenguaje, conceptos y teorías que intercambiar con los demás. También romper con la persistente idea social de que las matemáticas son difíciles, tediosas y desvinculadas de la realidad. Es una ciencia poderosa que aporta procedimientos de análisis, modelación, cálculo, medición y estimación del mundo natural y social, pero además (y esto creemos que es lo más importante) surge de la necesidad y el deseo de responder y resolver situaciones provenientes, tanto de la matemática misma como del mundo de las ciencias naturales, sociales, del arte y la tecnología.

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Partimos entonces de las nociones de proporcionalidad y número irracional y las transformamos en objeto de estudio e instrumento para el estudio de otros objetos, tomando como eje el número de oro y la divina proporción, tanto en los fenómenos que encontramos en la naturaleza como en sus aplicaciones en el arte.

Algunos de nuestros objetivos fueron: conocer y valorar las aplicaciones sociales del conocimiento científico; resignificar la noción de proporcionalidad para que sea un saber funcional; enlazar la matemática con las ciencias biológicas y artísticas a partir de la articulación de la proporción aurea en la naturaleza y en la plástica; ampliar nuestras capacidades de observar, identificar regularidades, hacer generalizaciones e interpretar cómo funciona la naturaleza.