Tabaco

Reducción de consumo, beneficios de dejar el cigarro

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Estrategias para reducir la prevalencia del consumo de tabaco

El tabaquismo constituye uno de los principales factores de riesgo de las enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT). Su consumo puede aparejar graves consecuencias para la salud, entre las que se encuentran las enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares, respiratorias y el cáncer.

El tabaco tiene un gran poder adictivo a través de uno de sus principios activos: la nicotina. Sin embargo, el consumo de tabaco es un factor de riesgo modificable y prevenible. Disminuir o anular su consumo reduce las posibilidades de tener complicaciones de salud y aumenta la calidad de vida.

 

Los beneficios de dejar el cigarrillo

Dejar de fumar genera beneficios importantes para nuestra salud y la de los que nos rodean. No importa la cantidad de cigarrillos fumados diariamente, ni la edad, siempre es un buen momento para dejar de fumar.

 

Algunas mejoras en la salud son inmediatas:

 A los 20 minutos, la presión arterial y la frecuencia cardíaca regresan a sus niveles normales.

● A las 8 horas, la respiración es más profunda y hay una mejor oxigenación pulmonar.

● A partir de las 48 horas, se normalizan los sentidos del gusto y el olfato.

 A las 72 horas, se normaliza la función respiratoria.

Otras se dan progresivamente:

 A los 6 meses, se reducen los catarros, los resfríos, las bronquitis y las molestias de garganta.

● 1 año después: se reduce a la mitad el riesgo de infarto y es menor el riesgo de trombosis o embolias cerebrales.

● 3 o 4 años después: el riesgo de padecer enfermedades del corazón se equipara al de los que nunca fumaron.

● 10 años después: el riesgo de padecer cáncer de pulmón se iguala al de los no fumadores. Lo mismo sucede con el riesgo de un accidente cerebro vascular.

● 10-15 años después: el riesgo de muerte del ex-fumador llega a equipararse al del no fumador.

● Los hombres y mujeres que dejan de fumar entre los 35 y los 39 años de edad ganan entre 5.1 y 3.2 años más de expectativa de vida.

Además, dejar de fumar:

 Disminuye el riesgo de cáncer de laringe entre 25-50% en comparación con el fumador habitual. Algunos estudios también muestran que se reduce el riesgo de otros tipos de cáncer, como el de cervix, vejiga, esófago, boca y páncreas.

● Reduce 20% los días perdidos por enfermedad y un 33% las visitas al médico.

En la mujer:

 Si una mujer embarazada deja de fumar durante los primeros tres meses de gestación, el riesgo de bajo peso al nacer del bebé se equipara con el de una madre no fumadora.

● Reduce el adelanto de la menopausia, que en las fumadoras es de 1 a 2 años, a sólo 6 meses o menos.

También mejora la salud de los demás:

Respirar humo de tabaco afecta la salud de los que no fuman: entre otras cosas, aumenta un 30% el riesgo de infarto y de cáncer de pulmón en los no fumadores. Los niños también sufren las consecuencias: está demostrado que los que viven en hogares donde se fuma padecen tos crónica, disminución de la capacidad de sus pulmones, y tienen más episodios de asma, bronquitis, neumonía y otitis. Estos riesgos desaparecen al dejar de fumar.

 

Listado de servicios gratuitos para dejar de fumar


El tabaquismo, un grave problema de salud pública

El tabaquismo es una de las principales causas de muerte evitable en el mundo. En Argentina, se estima que 40.000 personas mueren cada año por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco.

En la Ciudad de Buenos Aires, las causas de muerte que afectan a más del 70% de la población, son las enfermedades cardiovasculares, las respiratorias y los tumores.

Esto es así porque entre las enfermedades relacionadas con el tabaquismo activo y pasivo se encuentran: distintos tipos de cáncer (pulmón, esófago, vejiga, riñón, estómago, páncreas), enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfermedad coronaria, accidente cerebrovascular y enfermedad vascular periférica.

 

La adicción al tabaco en cifras

En la Ciudad fuma el 31,9% de la población adulta. A diferencia de otros lugares del país, donde los hombres fuman mucho más, en la Ciudad las mujeres fuman casi tanto como los varones.

 

Adolescentes y tabaquismo

● Fuma el 18,5% de estudiantes de entre 13 y 15 años, lo que marca un descenso del 27% con respecto al año 2000.

● El 45,6% probó cigarrillos alguna vez, aunque sea 1 o 2 pitadas.

● Al contrario que en los adultos, entre los adolescentes fuman más las mujeres que los varones.

Un aspecto preocupante, que se da no sólo en la Ciudad sino también en todo el país, es el descenso en la edad de inicio. El mayor porcentaje de adolescentes de nuestro país probó fumar por primera vez entre los 12 y 13 años (44,5%), mientras que un 21,6% lo hizo a los 11 años o menos.

 

Exposición al humo de tabaco ajeno

● Respirar humo de tabaco ajeno incrementa el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer y enfermedades respiratorias entre quienes no fuman.

● Se calcula que, de las 40.000 muertes anuales por tabaquismo en el país, 6000 corresponden a personas que nunca fumaron, pero que estuvieron expuestas al humo de tabaco.

● La Organización Internacional del Trabajo estima que en el mundo mueren como mínimo 200.000 trabajadores al año debido a la exposición al humo de tabaco ajeno en el trabajo.

● El 50,7% de los no fumadores de la Ciudad están expuestos al humo de tabaco ajeno, especialmente en sus lugares de trabajo. Esta cifra es superada, levemente, por 8 provincias (Catamarca, Tucumán, Misiones, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Mendoza y San Juan), que tienen más cantidad de fumadores.

● En el año 2002, se realizó en la Ciudad un estudio de medición de nicotina ambiental, con la colocación de filtros especiales en espacios públicos: un hospital, oficinas de gobierno, escuelas, bares, restaurantes y un aeropuerto. Fue llamativo encontrar mayor contaminación del aire con nicotina en una oficina que en un local bailable y restaurantes.

● Además, los niveles de nicotina ambiental de Buenos Aires fueron los más altos de todas las ciudades de América estudiadas.

● A nivel nacional, el 54,7% de los adolescentes se encuentra expuesto al humo de tabaco ambiental en el hogar, pero en la Ciudad este porcentaje es del 45,9%, cifra mucho menor que la del año 2002 (68,2%). En los lugares públicos también descendió la exposición al humo de tabaco, de 86,7% en el año 2000 a 66,7% en 2007.

● Este descenso en la exposición al tabaquismo pasivo es un logro muy importante de la política de control del tabaco en la Ciudad -y en todo el país-, especialmente a partir de la implementación de la Ley N° 1799, sancionada en 2005.

● El fortalecimiento de las políticas de prevención y control del tabaco, de la mano de la implementación de una ley 100% libre de humo, es fundamental para profundizar estos cambios positivos y proteger la salud de toda la población.

Incumplimiento de la ley antitabaco: Realizá una denuncia

 


Buenos Aires 100% libre de humo de tabaco

La Ciudad de Buenos Aires es una ciudad 100% libre de humo de tabaco. Cuidamos a todos los que circulan por la ciudad de los efectos negativos que tiene respirar el humo de tabaco.

Un poco de historia

La Ley N° 1799 de Control del Tabaco fue sancionada en 2005. Esta ley de la Ciudad de Buenos Aires entró en vigencia en octubre de 2006.

Contempla los siguientes puntos clave:

● Espacios públicos 100% libres de humo, con excepciones en cárceles e institutos psiquiátricos.

● Espacios de fumadores en los locales gastronómicos con más de 100 metros cuadrados de superficie (los espacios para fumar no pueden superar el 30% de la superficie del local).

● Acceso de la población al tratamiento gratuito para dejar de fumar.

● Prohibición de anuncios publicitarios de productos elaborados con tabaco, ya sea para su venta, promoción, entrega u oferta en forma gratuita.

● Campaña de concientización en la población.

● Campañas educativas.

Esta norma sirvió para concientizar a la población y produjo un efecto dominó sobre otras provincias, que comenzaron a trabajar en el tema. Además, tuvo una amplia aceptación social y se incrementó el apoyo de los jóvenes a los ambientes libres de humo. En el año 2006, luego de la entrada en vigencia de la ley, se repitió el estudio de medición de nicotina en el ambiente para comparar la situación en algunos espacios, y se encontraron disminuciones significativas en la concentración de este contaminante.

En diciembre de 2010 se aprobó la Ley Nº 3718, que establece que no se permite fumar en ningún espacio cerrado con acceso público, incluyendo bares, restaurantes, salas de fiestas, locales bailables, shoppings, cajeros automáticos, cabinas telefónicas, terminales de ómnibus, colectivos, estaciones de subte, clubes deportivos y gimnasios.

¿Por qué dejar de fumar?

La evidencia científica viene demostrando desde hace más de 20 años que la exposición al humo de tabaco puede causar efectos inmediatos, como irritación ocular, en la nariz y la garganta, o dolor de cabeza.

Con el tiempo, puede generar enfermedades respiratorias (bronquitis, neumonía, por ej.), distintos tipos de cáncer (principalmente de pulmón), y enfermedades cardiovasculares (infarto, angina de pecho).

Se trata entonces de un importante avance de la Ciudad para proteger la salud de todos, porque sólo con ambientes 100% libres de humo de tabaco se evita respirar las miles de sustancias tóxicas que emana el cigarrillo:

● Arsénico

● Cianuro

● Plomo

● Acetona

Entre otras, que permanecen en el ambiente por 14 días aunque se ventile.

Dejar de fumar genera beneficios importantes para nuestra salud y la de los que nos rodean. No importa la cantidad de cigarrillos fumados diariamente, ni la edad, siempre es un buen momento para dejar de fumar.

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