Desarrollo

Mientras diseñábamos nuestro experimento nos dimos cuenta que necesitábamos encontrar una bebida cola que no contenga cafeína para utilizarla como placebo. Para ello pedimos asesoramiento a la dirección de Bromatología de la Municipalidad de General San Martín, ente que nos proporcionó el método, pero al tratar de llevarlo a cabo en nuestro laboratorio nos dimos cuenta que nos faltaba un rotavapor para terminar el proceso. Por esa razón no pudimos determinar si alguna de las bebidas cola estudiadas carecía de cafeína y terminamos decidiéndonos por el uso de agua como placebo.

Compartir en redes

Nuestro trabajo comenzó 90 minutos antes del partido, preparando las bebidas que tomarían los participantes. Cubrimos las botellas para que no se vea el contenido (500 ml) y dividimos la muestra en tres grupos:

Dosis T1: Bebida Cola Diluida – Dosis T2: Agua – Dosis T3: Bebida Cola Pura.

Como los participantes no debían conocer que era lo que consumían, les aclaramos que una hora antes del partido debían tomar 500 ml de “X” bebida y les pedimos que intenten orinar, así evitábamos que tengan las vejigas llenas. Además cada participante fue marcado con un código para diferenciarlo y se registró el peso de cada participante volcando los datos en una tabla.

Sesenta minutos previos al partido cada participante tomó la bebida que le correspondía y almorzaron todos lo mismo. Mientras tanto preparábamos los frascos para la orina si es que alguno necesitaba orinar antes del partido. Si alguien hacia esto lo marcábamos como PAF (previo a la actividad física).

Los participantes ingirieron la primera dosis una hora antes de la actividad física para asegurarnos que la cafeína hiciera efecto. Cada alumno fue identificado con un código que indicaba el tipo de dosis que consumieron. Dos de ellos tomaron agua, dos tomaron bebida cola diluida y otros dos consumieron bebida cola pura.

Luego de esto comenzó al fin el partido, el cual duro 1 hora, tiempo en el que los participantes no podían beber ningún liquido. Terminado el partido volvimos a pesar a los jugadores y comparamos el peso inicial con el final.

Durante el partido los participantes bebieron la segunda dosis que compensa la pérdida de agua por sudor y ventilación.

Dentro de las siguientes 2 horas los participantes orinaron en los frascos correspondientes.

Finalmente registramos los resultados en una tabla que incluía la cantidad de orina excretada por cada participante, así como también el grado de deshidratación de los alumnos según el color de la orina. Para ello utilizamos el test de Armstrong:

Si la orina es más clara, esto indica que los desechos están más diluidos y por lo tanto hay mayor cantidad de agua. Por el contrario, si la persona está deshidratada, los riñones retienen agua y la orina se ve más oscura porque está más concentrada.