Información presupuestaria
Presupuesto de la Ciudad de Buenos Aires
El presupuesto es la expresión del Plan de Gobierno. Es el instrumento por el cual se asignan los recursos a cada una de las políticas y programas que se llevan adelante durante un año. Este elemento nos permite ejecutar las políticas públicas con transparencia, eficacia y legalidad.
El presupuesto es un elemento integrador de los distintos niveles de gobierno, que pone de manifiesto la capacidad de acción del Estado.
El presupuesto en cinco pasos
- A partir de las necesidades de la Ciudad, el Poder Ejecutivo fija prioridades que se transforman en programas en el presupuesto. El presupuesto público muestra el origen y el destino de los fondos públicos.
- El presupuesto es confeccionado por el Poder Ejecutivo, que lo eleva a la Legislatura el día 30 de septiembre de cada año, para su aprobación.
- En la Legislatura, la Comisión de Presupuesto y Hacienda lo analiza, debate y dictamina para que luego sea tratado y aprobado en una sesión en el recinto, antes del final de cada año.
- Una vez aprobado, el presupuesto es ley. Consecuentemente, el Poder Ejecutivo lo debe ejecutar.
- El control del manejo del presupuesto es fundamental. Por eso se prevén distintas instancias institucionales a través de las Unidades de Auditoría Interna, la Sindicatura de la Ciudad y la Auditoría General.
Ingresos
¿De dónde provienen los ingresos?
Los ingresos públicos provienen de cuatro fuentes: 1. Ingresos Tributarios Propios. 2. Coparticipación de Impuestos. 3. Ingresos no Tributarios. 4. Recursos de Capital.
Año tras año, la estructura de ingresos se compone de manera muy similar.
Composición de los Ingresos Totales
Ingresos Tributarios Propios
Se pueden clasificar de la siguiente forma: * Impuestos vinculados a la actividad económica y al consumo (Ingresos Brutos, Sellos), * Impuestos patrimoniales (ABL, Patentes), * Otros.
Podemos notar que la mayor parte de los ingresos no provienen de los impuestos patrimoniales, sino de las cargas impositivas a la actividad económica y al consumo.
Composición de los Ingresos Tributarios Propios
El 76% de los ingresos impositivos de la Ciudad proviene de los Ingresos Brutos, mientras que el ABL y el Impuesto a las Patentes aportan el 19% del total.
Evolución del ABL (Alumbrado, Barrido y Limpieza)
Uno de los impuestos más conocidos es el ABL. A lo largo de los años, porcentualmente el ABL ha decrecido en comparación con los ingresos totales de la Ciudad.
En 1991, el 24,9% del total de los ingresos del presupuesto provenía del ABL, en comparación con el 10,24% en 2009.
(*) No incluye Planes de Facilidades.
Expresado en millones de pesos.
Fuente: Ministerio de Hacienda - Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
ABL y Patentes
Existe un problema estructural en la valuación de la base imponible de los impuestos predeterminados (ABL, Patentes) que se refleja en la recaudación generada de cada uno de ellos:
El ingreso total por el cobro del ABL es de $ 1.293 millones, mientras que el ingreso por el cobro de Patentes es de $ 998,80 millones.
Fuente: Presupuesto Sancionado 2009.
Coparticipación
La Ciudad de Buenos Aires, contrariamente a la mayoría de las provincias, sustenta sus gastos con recursos propios.
Fuente: Ministerio de Hacienda - Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Podemos observar una dicotomía muy marcada entre lo que genera de riqueza la Ciudad de Buenos Aires y los recursos que recibe de la Coparticipación Nacional. La Ciudad aporta un 25% a los fondos de la Coparticipación Federal y recibe el 1,4% de los mismos.
Fondos aportados por Coparticipación
Ingresos No Tributarios
No todos los ingresos se obtienen de impuestos. El 4% proviene de otras fuentes, como ser:
- Tasas: servicios de fiscalización, habilitación o certificación; uso y ocupación de vía pública; inspección y verificación de obra; tasa de justicia; etc.
- Derechos: derecho de timbre; de cementerio; concesiones; etc.
- Multas: infracciones varias; código contravencional; etc.
- Otros ingresos no tributarios: espectáculos en salas de teatro; museos, etc.
Recursos de Capital Son los ingresos provenientes de la venta de activos y transferencias.
Gastos
Podemos analizar el gasto público de distintas formas:
De acuerdo a las áreas hacia donde esté dirigido:
Comparativo Ejercicios 2008/2009
De acuerdo al componente del gasto
Gasto público según componentes:
Fuente: Presupuesto Sancionado 2009.
La política social en los números del presupuesto
El gasto presupuestario para las políticas sociales incluye: Educación, Salud, Promoción y Acción Social, Cultura, Trabajo, Vivienda y Alcantarillado. El gasto social representa la mayor parte del presupuesto: en 2009 alcanza los $ 11.052 millones, que equivale a un 66% del total.
Expresado en millones de pesos.
Fuente: Presupuesto Sancionado 2009.
Expresado en millones de pesos.
Fuente: Ministerio de Hacienda - Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Educación
¿Qué se hace con el presupuesto de Educación de la Ciudad? El presupuesto para la Educación en la Ciudad es de $ 4.518,20 millones. Es la porción más grande del presupuesto total. Constituye casi un cuarto de la torta presupuestaria.
Salud
¿Qué se hace con el presupuesto de Salud de la Ciudad?
La Ciudad cuenta con un presupuesto para la Salud de $ 3.647,10 millones.
Es el segundo mayor presupuesto después de Educación.
Desarrollo Social
¿Qué se hace con el presupuesto de Desarrollo Social de la Ciudad?
La Ciudad cuenta con un presupuesto para Desarrollo Social de $ 1283,60 millones.
Resultado Operativo
Resultado operativo disponible para inversión
Si comparamos los ingresos con los gastos que la Ciudad debe cubrir, el excedente para nuevas inversiones es alrededor de $ 297 millones.
Expresado en millones de pesos.
Capacidad de financiamiento de la Ciudad
Cuando los ingresos superan los egresos, se dice que existe superávit, en cuyo caso se trata de fondos líquidos que pasan al ejercicio siguiente.
Cuando los ingresos son inferiores a los egresos, se denomina déficit. En este caso, para cubrir el faltante de dinero se recurre al endeudamiento.
Nunca el endeudamiento debe ser destinado a solventar gastos corrientes.
Para tener un ejemplo, la deuda de Nueva York es del 80% sobre el presupuesto total, mientras que la de Buenos Aires es sólo del 12%.
Inversiones necesarias
Son muchas las obras que la Ciudad necesita:
Arreglar las escuelas existentes, equipar con una computadora por alumno y realizar los laboratorios de idiomas y computación: $ 3.300 millones.
Poner en valor los 33 hospitales de la Ciudad, especialmente los 11 ex-nacionales que no recibieron mantenimiento preventivo y reequiparlos, crear nuevos centros de salud mental y Centros de Salud Comunitarios (CeSACs): $ 3.500 millones.
Equipar con tecnología y herramientas necesarias a 10.000 agentes de la Policía Metropolitana: $ 3.000 millones.
Atender las demandas de vivienda de las aproximadamente 350.000 personas que viven en situación irregular, sin incluir la ayuda a las familias de clase media que viven en la casa de sus padres o alquilan hace años: $ 9.230 millones.
Implementar un plan de sustentabilidad ambiental, para construir las centrales de tratamiento de residuos con la tecnología necesaria y aplicar nuevos planes de saneamiento ambiental: $ 6.864 millones.
Terminar las obras del Teatro Colón, poner en valor los teatros, bibliotecas y museos, y terminar el Museo de Arte Moderno de la Ciudad: $ 800 millones.
Ampliación de la red de Subtes, solamente haciendo 30 km nuevos (lo que haría un total de 80 km contra 200 km que tiene Madrid), modernizar los coches y adecuar las estaciones existentes: $ 23.100 millones.
Ayudar al reacondicionamiento del transporte público, construcción de un sistema de tránsito rápido, hacer los 80 pasos a nivel que faltan (como el Sarmiento y el Dorrego, entre otros) y reordenar el tránsito: $ 8.685 millones.
Mejorar el espacio público, arreglando el resto de las plazas de la Ciudad, terminar las obras de pavimentación, hacer los más de 8 millones de metros cuadrados de veredas (ya se hizo 1 millón) y reacondicionar los espacios verdes: $ 4.040 millones.
Y esto es sólo una pequeña lista de la deuda social que la Ciudad tiene con los vecinos, y todo esto se debiera realizar con los ingresos con los que cuenta Buenos Aires.
Este es un compromiso que todos debemos asumir, que trasciende a un gobierno y nos involucra a todos. Por esto es que hace falta parar la pelota, pensar a largo plazo, establecer prioridades y lograr cambiar la realidad de Buenos Aires de una vez por todas. La Ciudad de Buenos Aires mantiene un stock de deuda que representa aproximadamente el 10% de sus ingresos anuales totales, por lo que estaría en condiciones óptimas de acceder a la construcción de nueva infraestructura vía endeudamiento.