Textiles
La colección de indumentaria y accesorios del Museo Fernández Blanco, de origen heterogéneo e inconexo, se incrementó y completó, desde el año 2008, gracias a donaciones de colecciones familiares datadas entre la segunda mitad del siglo XIX y las primeras décadas del siglo XX.
Hace apenas unos años, pensar en la colección de indumentaria se reducía a dos lotes de piezas relativamente inconexos. Por una parte, los ornamentos litúrgicos reunidos por Isaac Fernández Blanco bajo una mirada decimonónica sobre un pasado virreinal y con una marcada presencia del calendario litúrgico. Por otra parte, algunas prendas y accesorios aislados correspondientes a la primera mitad del siglo XIX, provenientes de las familias Fernández Blanco y Suárez de La Casa y, particularmente, el original conjunto de peinetas y peinetones donados por Celina González Garaño.
El patrimonio era heterogéneo y su conformación el resultado de voluntades dispersas: no respondía a un programa de adquisiciones.
En el transcurso del año 2008, con la donación de María Elena Del Solar Dorrego de Casal, integrada por trajes, accesorios y fotografías de 1870 a 1912, la colección de indumentaria, enriquecida y complementada por el registro fotográfico, pudo leerse por primera vez no como un objeto curioso, sino como el reflejo de las modas, prácticas de indumentaria y circulación comercial de estos objetos en la sociedad argentina de los siglos XIX y XX, y así encarar entonces su proceso de conservación y restauración como fuentes fundamentales de aquel período formativo.
Esta concepción se vio profundizada por el efecto replicador que produjo la donación Del Solar Dorrego de Casal y su exhibición en el Palacio Noel, traduciéndose en nuevas donaciones sucesivas durante el trascurso de los años 2009, 2010 y 2011.
Finalmente en el año 2019, la Casa Fernández Blanco abrió la sala de exhibición permanente dedicada a esta nutrida y creciente colección de indumentaria y accesorios de modas (1830-1930).