Eficiencia Energética y Uso Racional
La formación y la información son claves para lograr un cambio de conducta respecto a cómo ahorrar energía. Conocé los proyectos e iniciativas que la Agencia de Protección Ambiental destina a la ciudadanía y a la administración pública en materia de uso racional y eficiencia energética.
Al comenzar un proyecto de eficiencia energética siempre sugerimos implementar los conceptos que nos plantea la pirámide energética, porque señala cómo podemos reducir el consumo de energía siguiendo progresivos niveles de complejidad y costos económicos.
El uso racional de la energía constituye la base de la pirámide energética, no implica inversión y es muy simple de implementar. Esas acciones se basan en cambios de conducta en determinados usos. Por ejemplo, apagar la iluminación al salir del ambiente. Luego, debemos pensar en la eficiencia energética considerada un conjunto de estrategias a fin de reducir y optimizar el consumo de energía de determinados dispositivos y sistemas para obtener la misma o mejor prestación. Estas medidas sí implican inversión. Por ejemplo, cambiar las lámparas halógenas por otras LED. En la cima de la pirámide se encuentran las energías renovables. A pesar de que hoy en día resultan medidas más complejas e implican mayor inversión, es fundamental empezar a reemplazar el consumo de la energía convencional. Es importante que sepas que podés autogenerar energía y depender menos de tu distribuidora
Es importante tener en cuenta que la “seguridad energética” está en la base de esta pirámide. Se entiende por "seguridad" a la reducción de los riesgos para los seres vivos. Es muy importante tomar las precauciones necesarias para no ponernos en peligro, ni a otras personas, ni a la infraestructura.
Acciones en Edificios Públicos
Se trata de una serie de acciones realizadas en el marco de la ley N° 3.246, de eficiencia energética en edificios públicos. Con ellas, promovemos la disminución del consumo de energía en los edificios públicos pertenecientes al Gobierno de la Ciudad. Entre las acciones, intercambiamos buenas prácticas y cooperamos con otras ciudades.
→Te invitamos a que leas más aquí.
Formación e información en energía
La información y la formación son acciones claves para lograr un cambio de conducta que mejore el ahorro de energía. Por ello, diseñamos e implementamos una serie de cursos, charlas informativas y jornadas de sensibilización presenciales y online destinados a la administración pública y a la ciudadanía, en general. También contamos con un Centro Digital de Recursos.